El gobierno de Rafael Correa espera con la aplicación de los contratos en estos campos un valor presente neto de alrededor de US$750 millones de ingresos. Los contratos de los campos marginales, con reservas de 35 millones de barriles, serán suscritos en noviembre.
Ecuador recibió este lunes ofertas de ocho empresas locales y extranjeras para la exploración y explotación de campos marginales de petróleo, como parte de una licitación internacional con la que busca aumentar su producción de crudo.
Las empresas que se adjudiquen los contratos deberán realizar una inversión de US$180 millones en conjunto, por los tres años que dura el contrato para elevar la producción de petróleo del país, en unos 10.000 barriles diarios (bpd).
El ministro de Recursos Naturales No Renovables, Wilson Pástor, dijo que con la aplicación de los contratos en estos campos "se espera un valor presente neto de alrededor de US$750 millones de ingresos para el Estado".
Los contratos de los campos marginales, con reservas de 35 millones de barriles, serán suscritos en noviembre.
Los bloques a licitarse son Armadillo, Chanangue, Charapa, Eno-Ron, Ocano-Peña Blanca y Singue, en la amazonia del país.
Para el campo Charapa no se presentaron ofertas, por lo que la compañía estatal Petroecuador asumiría la operación del campo.
Los nuevos contratos serán bajo la modalidad de prestación de servicios, en donde el Estado pagará una tarifa a la firma por la extracción del crudo a cambio de recibir la totalidad de la producción del campo.
A fines del 2010, el presidente de izquierda Rafael Correa concluyó una renegociación de contratos con todas las petroleras que operaban en el país para pasarlas de socias a meras operadoras de las áreas concesionadas.
La producción actual de los campos marginales representa el 6 por ciento del bombeo total del país, que asciende a unos 500.000 bpd.