Estados Unidos está investigando si Venezuela ha enviado gasolina a Irán a pesar de las sanciones que Washington ha impuesto a tales actividades, dijo este martes un funcionario de alto rango del Departamento de Estado.
Washington. Estados Unidos está investigando si Venezuela ha enviado gasolina a Irán a pesar de las sanciones que Washington ha impuesto a tales actividades, dijo este martes un funcionario de alto rango del Departamento de Estado.
Arturo Valenzuela, Secretario de Estado adjunto para asuntos del Hemisferio Occidental, respondía a preguntas del representante Connie Mack sobre reportes de que Venezuela había reanudado los envíos de gasolina a Irán.
"Permítame decir que estamos investigando ese tema", dijo Valenzuela a una subcomisión de asuntos internacionales de la Cámara de Representantes presidida por Mack, un republicano.
Valenzuela dijo que funcionarios estadounidenses habían planteado el tema tanto con la compañía petrolera estatal venezolana Pdvsa y el gobierno venezolano, "porque estamos intentando determinar si hay o no una violación de hecho".
Pero rehusó decir qué podría ocurrir si ha ocurrido una violación a las leyes de Estados Unidos.
La República islámica de Irán, considerada como un estado que patrocina el terrorismo por Estados Unidos, y el gobierno de Venezuela, que frecuentemente se enfrenta a Washington por temas regionales, han ampliado sus relaciones en los últimos años.
Envío de dos cargos. Fuentes comerciales dijeron en enero de este año que la compañía estatal venezolana PDVSA estaba enviando dos cargas de gasolina a Irán. Las cargas eran para entrega en febrero, dijeron tres fuentes comerciales a Reuters.
Para intentar lograr que Irán descarte su programa nuclear, Estados Unidos aprobó el 2010 sanciones que apuntan contra los sectores energético y bancario de Irán mediante la amenaza de penalizar a las compañías extranjeras que hagan negocios con Irán.
Como resultado, las grandes compañías petroleras han detenido sus negocios con Irán, que depende de las importaciones de gasolina debido a que carece de capacidad de refinación.
Compañías de otros países que no cumplan las prohibiciones de Washington en su acuerdos con Irán podrían enfrentar duras sanciones, como ser excluidas del sistema financiero de Estados Unidos o que se les niegue el acceso a los contratos en el país.
Pero las leyes de Estados Unidos pueden saltarse si el presidente considera que es del interés de Estados Unidos el hacerlo. Venezuela es el cuarto mayor proveedor internacional de petróleo crudo y productos del petróleo como la gasolina a Estados Unidos.
Las prohibiciones de Estados Unidos son separadas de las que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas impuso a Irán por su negativa a detener su enriquecimiento de uranio. Esas sanciones no incluyen una prohibición a las ventas de gasolina.
Venezuela siguió enviando gasolina a Irán, ignorando las nuevas sanciones de Estados Unidos, hasta octubre del año pasado, cuando el ministro de Energía del país miembro de la OPEP dijo que Irán ya no los necesitaba.
La República Islámica, el quinto mayor exportador de crudo del mundo, depende de las importaciones de combustible debido a su falta de capacidad de refinación. Había importado entre 10 y 12 cargamentos al mes antes de las sanciones.