En tanto, los inventarios de crudo crecieron 883.000 barriles a 382,53 millones, frente a las expectativas de un alza de 1,0 millón.
Las existencias de petróleo de Estados Unidos subieron modestamente la semana pasada, mientras que las de productos refinados cayeron, mostró este miércoles un informe de la gubernamental Administración de Información de Energía (EIA por su sigla en inglés).
Los inventarios de crudo crecieron 883.000 barriles a 382,53 millones, frente a las expectativas de un alza de 1,0 millón.
En las últimas nueve semanas, las reservas petroleras han aumentado en 36 millones de barriles.
Las existencias de gasolina bajaron 3,3 millones de barriles, a 201,01 millones. Los analistas esperaban una baja de 500.000 barriles.
Los inventarios de gasolina han caído 31 millones de barriles desde los 232 millones que marcaron en febrero.
Las reservas de destilados, que incluyen combustible para calefacción y destilados, cayeron 309.000 barriles, a 119,49 millones, frente al retroceso de 200.000 barriles que aguardaba el mercado.
Las existencias de crudo en Cushing, Oklahoma, el punto de entrega de los contratos estadounidenses, subieron en 1,67 millones de barriles, a un récord de 46,8 millones.
Las importaciones de crudo cayeron en 298.000 barriles por día, a 8,54 millones de bpd.
La utilización de refinerías cayó 0,2 puntos porcentuales, a un 88,1% de la capacidad. Los analistas habían pronosticado un incremento de 0,4 puntos porcentuales.
Los futuros de crudo estadounidense para julio bajaban US$1,22 por barril, a US$90,63, a las 14:36 GMT.
"El mayor descenso del crudo estadounidense no es inesperado. El mercado cerró con una tendencia negativa el martes y estas estadísticas sólo arrojan más peso al mercado. Sólo imaginaría compras a US$90,25", dijo Tony Rosado, corredor de Ga Global Markets, en Nueva York.
Por su parte, Mark Waggoner, presidente de Excel Futures, en Oregon, declaró que "el reporte de inventarios de la EIA es alcista en relación a las expectativas. Pero los futuros de crudo están siendo fuertemente afectados por el descenso del mercado bursátil ante la caída del euro, a medida que la crisis de deuda europea empeora".