Además, el 17% de las compañías peruanas participantes del estudio afirma que en los últimos 24 meses perdieron una oportunidad de negocio contra un competidor que, ellos creen, pagó un soborno.
En el Perú, el 41% de las empresas comprendidas en el estudio Global Economic Crime and Fraud Survey 2020, afirma haber sido víctima de fraude en los últimos dos años.
Además, el 17% de las compañías peruanas participantes del estudio afirma que en los últimos 24 meses perdieron una oportunidad de negocio contra un competidor que, ellos creen, pagó un soborno.
Si bien algunas empresas del sector privado se han visto envueltas en escándalos de corrupción, solo el 6% de las organizaciones peruanas confiesan haber sido acusadas de fraude, corrupción u otro crimen económico en los últimos dos años, mientras que el 90% niega que tal situación se haya presentado en sus empresas.
Asimismo, el 22% de las empresas en el Perú afirma tener un conocimiento extenso sobre los crímenes económicos.
En ese sentido, ante las constantes amenazas que presentan este tipo de delitos, las compañías hacen los esfuerzos necesarios para combatirlos.
Por ello, cuentan con programas preventivos específicos, principalmente para casos de soborno y corrupción (78%), lavado de dinero (75%), y fraude corporativo (52%).
Adicionalmente, el 47% planea aumentar los fondos para combatir casos de fraude y corrupción en los próximos 24 meses, según el documento elaborado por PricewaterhouseCoopers (PwC).
En el Perú el 35% de los encuestados pertenecen al nivel de la alta gerencia, y el 86% de las empresas tienen ingresos anuales superiores a los 10 millones de dólares.
A nivel mundial. Los líderes de negocios a nivel mundial afirman que los crímenes más disruptivos son el fraude cometido por clientes, que encabeza la lista con 35% de casos experimentados, seguido de los crímenes cibernéticos con 34%.
Aunque el fraude cometido por los clientes muestra un aumento (29% en 2018), es uno de los tipos de crimen donde existen recursos, procesos y tecnología específica para ser más efectivos en el ámbito preventivo.
Los crímenes más costosos para las organizaciones son el soborno y corrupción, información privilegiada, lavado de dinero, antimonopolio, y fraude fiscal.
Los casos de fraude en las organizaciones suelen ser perjudiciales en el ámbito financiero.
El 13% de los encuestados que experimentaron fraude han reportado pérdidas por encima de los US$50 millones. En cuanto al origen de este tipo de actos, los causantes de fraude son principalmente externos (39%), donde el 26% son clientes y el 24% hackers.
Por otro lado, en un 37% el origen del fraude es interno, siendo los mandos medios (34%) y el personal operativo (31%) los principales autores.
Un 29% de empresas dijo que se les solicitó pagar un soborno en los últimos 24 meses, mientras que un 30% que perdió una oportunidad frente a un competidor piensa que este pagó un monto para obtenerla.
A nivel global, todas las regiones han experimentado fraude ocasionado por clientes en los últimos dos años, siendo el Medio Oriente (47%) y Norteamérica (41%) las regiones con el mayor registro de casos.
Sobre el estudio. El informe encuestó a más de 5,000 ejecutivos en 99 territorios, acerca de las experiencias de fraude y crímenes económicos dentro de sus organizaciones en los últimos 24 meses.
Se les preguntó si habían sido víctimas de un delito económico, cuántas veces en los últimos años, de qué tipo de delito y qué hicieron para prevenir que pase de nuevo.