Esa es la opinión del fundador de la plataforma Coinbase -una plataforma que sirve de cartera virtual y de mediador en comercio electrónico con bitcoin-, Brian Armstrong.
Madrid. La moneda virtual bitcoin se erigirá en alternativa al "duopolio" de las tarjetas de crédito que conforman Visa y Mastercard, ya que puede consolidarse como una red abierta e instantánea para los pagos.
Esa es la opinión del fundador de la plataforma Coinbase -una plataforma que sirve de cartera virtual y de mediador en comercio electrónico con bitcoin-, Brian Armstrong, quien ha indicado hoy en un encuentro con periodistas en Madrid que los actores bancarios tradicionales consideran a la moneda virtual más un juguete que una amenaza.
Sin embargo, a su juicio, en el próximo lustro se va a producir una "gigante ola de adopción de monedas virtuales", un fenómeno que se verá impulsado por la creciente penetración del internet móvil: el directivo ha destacado que muchos millones de personas en el mundo tienen ya un celular, pero no una cuenta bancaria.
Está convencido de que bitcoin se va a consolidar como una "red abierta para pagos" que va a competir con el "duopolio" de las tarjetas de crédito de Visa y Mastercard, ya que ofrece reducir el coste de las transacciones y cualquiera puede tener acceso a él.
Armstrong ha afirmado que el uso de la moneda virtual será de destacada utilidad en el ámbito de las microtransacciones, los pagos internacionales y el comercio electrónico -especialmente para los negocios de bajo margen que puedan ahorrar en el coste de las transacciones-.
En concreto, prevé que bitcoin sea "agitador" en el negocio de las remesas, "que no deberían costar tanto".
Armstrong ha sostenido que el objetivo de la empresa Coinbase es hacer que el uso de bitcoin sea sencillo, seguro y fiable.
Es una plataforma que permite a individuos y compañías comprar, vender o almacenar bitcoins utilizando una cuenta bancaria, pero también que las empresas implementen la moneda como forma de pago -Dell anunció este verano que se subía a este carro- y que los desarrolladores creen aplicaciones para el uso de bitcoin.
Coinbase está presente en 19 países, incluida España -donde llegó hace tres semanas y donde hay actualmente 9.000 usuarios registrados-: Estados Unidos, Irlanda, Suecia, Dinamarca, Polonia, Italia, Francia, Bélgica, Suiza, Holanda, Austria, Chipre, Finlandia, Grecia, Malta, Portugal, Letonia y Eslovaquia.
En Europa, la compañía trabaja con dos bancos, aunque su fundador ha rehusado hacer públicos sus nombres.
Coinbase cuenta, según el directivo, con 1,7 millones de usuarios con cartera virtual de bitcoins, un 24% de la cuota total de ese mercado, y 36.000 empresas han incluido Coinbase en sus plataformas de comercio electrónico.
Ha añadido que 7.000 desarrolladores trabajan en el desarrollo de aplicaciones para bitcoin.
Su objetivo en Europa es llegar al millón de carteras virtuales y atraer a grandes compañías para que utilicen bitcoin como moneda de pago.
Desde su aparición en 2009, bitcoin se postuló como una alternativa al sistema monetario actual, con alcance universal, sin más regulación que la marcada por su algoritmo y la confianza de sus usuarios, aunque ha destacado por una volatilidad propia del mercado bursátil.
Armstrong ha reconocido que bitcoin ha experimentado tres burbujas de precio desde su creación, pero ha negado que la volatilidad y la especulación afecten a la moneda ya que la transacciones y los depósitos cada vez crecen más.