Las cuatro grandes petroleras que cotizan en ámbitos bursátiles -ExxonMobile, BP, Royal Dutch Shell y Chevron- sufren con el descenso del precio.
El desplome de los precios del crudo en los últimos meses ha afectado a los resultados de las grandes petroleras privadas, en especial en las cuentas del último trimestre de 2014, cuando la caída de la cotización ha sido más pronunciada.
Las cuatro grandes petroleras cotizadas -ExxonMobile, BP, Royal Dutch Shell y Chevron- ganaron el pasado año US$70.593 millones de (62.200 millones de euros), un 25% menos que en 2013, lastradas por la caída de los precios del crudo.
El barril de crudo Brent, de referencia en Europa, ha llegado a cotizar en las últimas semanas por debajo de los US$50, muy lejos de los más de US$100 que se anotaba a finales de verano de 2014, cuando inició su senda descendente.
Así, las cuentas más afectadas han sido las referentes al último trimestre de 2014, cuando las cuatro grandes petroleras ganaron US$6.407 millones (5.645 millones de euros), un 60% menos.
ExxonMobil prácticamente igualó su beneficio anual al
contabilizar US$32.580 millones (28.725 millones de euros), aunque sus ganancias en los tres últimos meses de 2014 se desplomaron en un 21%.
En 2014, la petrolera estadounidense ingresó US$411.939 millones (363.000 millones de euros), un 6% menos que el año anterior.
Estas cuentas estuvieron muy afectadas por la caída del precio del crudo, aunque pudieron salvarse, según la compañía, gracias a la diversificación de negocios del grupo.
Por su parte, Shell ganó US$15.052 millones (13.336
millones de euros) en 2014, un 8% menos, mientras que sus beneficios trimestrales se hundieron más de un 50 %.
La facturación anual, de US$421.105 millones (373.099 millones de euros), cayó un 7,1%.
Pese al fuerte retroceso de los precios del crudo, el consejero delegado de la petrolera, Ben van Beurden, ha defendido una "actitud prudente" y ha pedido ser cuidadoso y no reaccionar demasiado.
El beneficio anual de BP se desplomó en un 83,9%, hasta los US$3.780 millones (3.330 millones de euros), tras registrar unas pérdidas de más de 4.000 millones de dólares en el último trimestre del año debido a la caída de los precios del crudo.
A pesar de estos factores, los ingresos se mantuvieron
relativamente estables en 2014, cuando cerró con US$353.568 millones (311.139 millones de euros), un 6,7% menos.
El consejero delegado de la compañía, Bob Dudley, señaló con motivo de la presentación de las cuentas que BP tiene ahora que concentrarse en equilibrar su programa de capital y atender los costes ante "la nueva realidad de los precios bajos" del crudo.
Mientras tanto, Chevron ganó US$19.241 millones (unos 17.000 millones de euros) en 2014, un 10 % menos, después de que los beneficios netos del último trimestre se hundieran casi un 30%.
Los ingresos descendieron el pasado año un 8,9 %, hasta los US$200.494 millones (unos 177.000 millones de euros).
El presidente del grupo, John Watson, comentó al respecto que la caída del beneficio se debe al "agudo descenso en los precios internacionales del petróleo", al mismo tiempo que destacó que el retroceso fue amortiguado por los buenos resultados de la división
de refino y comercialización.
La única petrolera española cotizada, Repsol, tiene previsto presentar sus cuentas correspondientes a 2014 el próximo 26 de febrero.