"Vamos a rescatar el orgullo de los cariocas de tener la puerta de entrada de Brasil", afirmó el presidente de la concesionaria Río Galeao, Luiz Rocha.
Río de janeiro. El consorcio que se adjudicó la concesión para operar el aeropuerto internacional de Río de Janeiro, que asumirá el comando de la terminal a partir de este martes, anunció hoy que construirá 26 nuevos muelles de embarque para doblar la capacidad de transporte de pasajeros hasta 2016.
"Vamos a rescatar el orgullo de los cariocas de tener la puerta de entrada de Brasil", afirmó el presidente de la concesionaria Río Galeao, Luiz Rocha, en una rueda de prensa en la que anunció las inversiones que la empresa realizará al menos hasta los Juegos Olímpicos que la ciudad organizará en 2016.
El consorcio se propone invertir 2.000 millones de reales (unos US$909,1 millones) en los próximos dos años para construir 26 puentes de embarque en la segunda terminal del aeropuerto, 68 mostradores de registro de pasajeros, 47 estacionamientos para aviones y 2.700 cupos adicionales en los estacionamientos de automóviles para el público.
Esa inversión inicial estará destinada a atender las necesidades de los Juegos Olímpicos, pero la empresa se propone invertir otros 3.000 millones de reales (unos US$1.363,6 millones) después del evento deportivo.
Tras los Juegos Olímpicos serán construidos nuevos muelles en la primera terminal, lo que permitirá aumentar la capacidad de transporte de pasajeros sin la necesidad de construir una tercera terminal, como se planeaba inicialmente.
La concesionaria Río Galeao iniciará a partir de este martes un período de transición de unos seis meses, durante el cual le será transferida la gestión del aeropuerto de manos de la Infraero, la estatal que administra las terminales aéreas del país.
Las empresas privadas serán responsables por la gestión del aeropuerto internacional Galeao en los próximos 25 años pese a que Infraero mantendrá un 51% del control en el consorcio, que cuenta como socio principal a la constructora brasileña Odebrecht y cuyo operadora es la singapuresa Changi.
La Agencia Nacional de Aviación Civil (Anac) de Brasil calcula que la demanda de Galeao saltará de los actuales 17 millones de pasajeros por año a unos 60 millones en 2038, cuando vence la concesión.
Según Rocha, algunos de los cambios previstos serán ofrecidos a partir de mañana, cuando serán instalados sistemas electrónicos para ingresar al estacionamiento y 80 cámaras para mejorar la seguridad, así como servicios de atención bilingüe, nuevas opciones de tiendas y restaurantes y conexión a internet inalámbrica gratuita.