Gracias al positivo comportamiento económico de los países que utilizan la hidrovía Paraguay-Paraná, vicepresidente del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos del Paraguay (CAFyM), observa con buenos ojos lo que se viene al país en la materia.
Asunción. Guillermo Ehreke, vicepresidente del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos del Paraguay (CAFyM) y presidente de la Naviera Yerutí y el astillero “La Barca del Pescador” sostuvo este fin de semana que la producción de carne, soja y otros granos y cereales está creciendo permanentemente, por lo que el sector de la logística, que incluye a los puertos y al transporte fluvial, se tendrá que expandir y adecuar permanentemente para atender dichas necesidades.
“La producción de granos del Paraguay, por ejemplo, a principios de los años 90 era de 700.000 toneladas al año, pero en las últimas cosechas llegaron a casi 8.000.000 de toneladas y seguirá creciendo”, destacó Ehreke.
De allí que, por ejemplo, en el propio astillero que preside se haya iniciado la semana pasada la construcción de un remolcador que costará US$ 17 millones.
Ehreke destaca que la flota fluvial paraguaya, “aunque mucha gente no lo sepa y no lo crea”, es la tercera más grande del mundo, después de la del Mississippi (Estados Unidos) y la del Yangtsé, en China. En la hidrovía Paraguay-Paraná, la flota paraguaya representa cerca del 85%”, expresó.
Dijo, además, que todo el comercio internacional paraguayo, de los grandes volúmenes y de valores relativos, como son los commodities (productos agrícolas en estado natural o básicamente procesados) se exportan vía fluvial.
“El 80% de todo lo que se mueve en valor de importación y exportación es por vía fluvial y el 90% en cuanto al volumen y peso. Imagínense la importancia que tiene este sector para la economía paraguaya. A raíz de esto, Paraguay hoy día exporta servicios de transporte fluvial a los países de la región”, resaltó.
Acotó que Paraguay se ocupa hoy de transportar casi la totalidad del mineral de hierro que Brasil exporta y que exportará en el futuro y lo que produzca Bolivia y parte de la Argentina.
“Increíblemente, a pesar de todos los problemas que nos generan los argentinos, utilizan buenas cantidades de embarcaciones paraguayas para el movimiento de sus cargas”, expresó el armador.
Estima que se ha estado moviendo unos 22 millones de toneladas de carga de importación y exportación al año, lo que seguirá creciendo, principalmente en forma importante las de los minerales de hierro, donde la empresa brasileña “Vale do Río Doce”, que explota las minas en Corumbá (Brasil), estima que su exportación estará en torno a los 20 millones de toneladas, con lo que se triplicaría lo que hoy se mueve por el río Paraguay.
“Así, la producción de granos de la región, de la zona de Mato Grosso do Sul, de Bolivia seguirán creciendo a la par que la producción paraguaya; por ende, las perspectivas en cuanto a la ocupación de bodegas es muy promisoria, por lo cual el Paraguay tiene que seguir haciendo sus deberes para seguir teniendo la preeminencia que ha tenido hasta ahora, para seguir ocupando mayor cantidad de gente de la que emplea hoy, y para poder seguir pagando los salarios que se pagan hoy en el ámbito de la navegación”, subrayó.