Los salmones “presentan residuos de antibióticos superiores al límite permitido por el CODEX Alimentarius Internacional (Código Alimenticio) y pueden provocar consecuencias negativas en la salud de quienes los ingieran“, señala la investigación.
Un estudio del Instituto de Tecnología de la Fundación de la Universidad de la Empresa (UADE) asegura que en Argentina, el 66% de los salmones importados desde Chile contienen restos de flumequina y clorhidrato de oxitetraciclina, dos antibióticos que pueden ser riesgosos para la salud humana.
Los salmones “presentan residuos de antibióticos superiores al límite permitido por el CODEX Alimentarius Internacional (Código Alimenticio) y pueden provocar consecuencias negativas en la salud de quienes los ingieran“, señala la investigación, según diario La Nación de Argentina.
La UADE llegó esta conclusión tras examinar muestras de más de 100 productos en 38 comercios de Buenos Aires.
“El 66% de los casos presenta restos de flumequina y, principalmente, clorhidrato de oxitetraciclina, ambos compuestos de los antibióticos utilizados en los criaderos de salmón para contrarrestar las enfermedades que provocan sus muertes”, explica el estudio.
“Es falso”. La aseveración hecha por la UADE fue rechazada por el gerente general de SalmónChile, Felipe Montero, quien aseguró que las conclusión de la investigación “es falsa”, consignó La Segunda.
“En los últimos 4 años no hemos tenido ni un caso de residuos de antibióticos en ninguno de los 70 mercados a los cuales exportamos”, declaró Montero.
El ejecutivo indicó que en Chile se revisan todas las jaulas y que las plantas de procesamiento son controladas por el Estado, que en conjunto con la Universidad de Chile aprueban la exportación de los salmones.