Henrique Meirelles, ex dirigente del Bank of Boston, fue presidente del Banco Central durante los ocho años del gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.
El ex presidente del Banco Central de Brasil Henrique Meirelles, es uno de los candidatos a presidir la petrolera estatal brasileña Petrobras, protagonista de un escándalo de corrupción y cuya actual dirección está en la cuerda floja, informó la prensa local.
Meirelles, ex dirigente del Bank of Boston, fue presidente del Banco Central durante los ocho años del gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) y su nombre aparece como posible sustituto en Petrobras de la presidenta de la compañía, María da Graça Foster.
Foster estuvo reunida tres horas el martes en el Palacio del Planalto con la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, con quien habría acordado su salida y la del resto del directorio de la petrolera durante febrero, según fuentes no identificadas citadas hoy por diferentes diarios.
Pese a tal versión, el ministro de la secretaría de Comunicación de la Presidencia de la República, Thomas Traumann, precisó que la salida de Graça Foster "no fue decidida" en la reunión.
Petrobras se encuentra envuelta en un escándalo de corrupción por sobreprecios, tráfico de influencias y sobornos durante al menos una década, por el cual están detenidos tres ex directores de la petrolera y los dirigentes de varias empresas que eran contratistas de la estatal.
Según informó la semana pasada el Ministerio Público Federal, el dinero del que se tiene pruebas que fue desviado hasta ahora en las operaciones de corrupción suma 2.100 millones de reales (unos US$892 millones).
De acuerdo con el diario Folha de Sao Paulo, el ex presidente Lula tiene pensado sugerir a Rousseff, su delfín político, el nombre de Meirelles para el cargo de Foster.
El diario Valor Económico, por su parte, informó de que el ministro de Economía, Joaquim Levy, recibió el encargo de buscar un nombre con aceptación en el mercado financiero para el cargo.
La supuesta salida de la presidenta de Petrobras agitó la Bolsa de Valores de Sao Paulo, donde las acciones de la empresa estatal de capital abierto escalaron más del 15% el martes.
Petrobras presentó la pasada semana los resultados financieros del tercer trimestre de 2014, pero excluyó de su balance las pérdidas causadas por desvíos en el seno de la estatal, que cuenta con 85.000 trabajadores.
No obstante, la compañía estimó que sus activos fueron sobrevalorados en 88.600 millones de reales (34.500 millones de dólares) por el aumento del precio de 31 contratos con constructoras y proveedores entre 2004 y 2012.
Esa cifra, sin embargo, incluye la apreciación de los activos provocada por variables como la tasa de cambio y otras, y no tiene en cuenta las pérdidas derivadas del pago de sobornos.