"No cabe ninguna duda que el gobierno tenía que actuar en el mercado de los hidrocarburos porque había problemas", manifestó el presidente de la Federación de Expendedores de Combustibles y Afines del Centro, Raúl Castellano.

El presidente de la Federación de Expendedores de Combustibles y Afines del Centro (Fecac), Raúl Castellano, se refirió al proyecto de expropiación de YPF y estimó que "no cabe ninguna duda que el gobierno tenía que actuar en el mercado de los hidrocarburos porque había problemas".

"En realidad no esperábamos una salida de esta magnitud", reconoció Castellano, y agregó que "lo que sí está claro es que más allá de lo que se invierta en comprar YPF va a haber que hacer inversiones muy grandes en lo que hace falta, una nueva refinería, inversiones en exploración, etc. Nos espera un período de inversiones fuertes", expresó.

"Pero esto de por sí no asegura el abastecimiento, sí asegura un manejo de la empresa conforme a las necesidades del país, pero no hay que esperar soluciones inmediatas, hasta que no haya inversiones en la producción los resultados no se van a ver", explicó.

Desde "la Federación, creemos que sí hay que normalizar la situación del combustible en nuestro país que por estos días viene siendo anormal, hay que asegurar el abastecimiento".

"La empresa hay que manejarla de una forma adecuada, tiene que reinvertir una parte importante de sus ganancias. Es una cuestión de plata, que hace falta de una forma más o menos inmediata para asegurar abastecimiento en dos o tres años", amplió Castellano.

Asimismo, entiende que en el corto plazo no habrá una baja en el precio del combustible, porque "la única forma que baje el combustible es con una política de subsidios. Al ser YPF la empresa más grande del sector, tiene el 60% del mercado, el Estado va a tener la posibilidad de fijar los precios y las políticas comerciales".

En tanto, el propietario de varias estaciones de servicio, Luis Pavone, expresó que "como argentino y expendedor estoy más que contento".

"Es una decisión que tomé con mucha alegría como argentino. Empecé con un surtidor de YPF en el año `70, en Taninga. Un surtidor que no tenía electricidad, era a bomba. Así que mi alegría con lo de YPF es muy grande. Sufrí mucho el día que se privatizó, que se enajenó porque para mí fue que se enajenó", manfiestó.

"Hoy que esté en nuestras manos me hace recordar que cuando antes usted llegaba a cualquier punto del país y encontraba un surtidor y era de YPF. Y encontraba nafta, y gasoil. Hoy como argentino y expendedor que hace más de 40 años que estoy en el rubro, estoy más que contento", agregó.