Según los datos de la Oficina de Programación y Política Agropecuaria, se prevé que para el 2018 mejorarán las exportaciones, pero habrá un nulo crecimiento de 0,01% del Producto Interno Bruto sectorial.
El Observador de Uruguay. Pese a una fuerte recuperación de la economía mundial, que impactará en las exportaciones agroindustriales, el agro se estancará en 2018 con nulo crecimiento de 0,01% del PIB sectorial, según los datos manejados este miércoles en la presentación del Anuario 2017 de la Oficina de Programación y Política Agropecuaria (Opypa).
Durante el acto realizado en el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), la economista Ángela Cortelezzi resaltó las características favorables de la recuperación económica externa.
Básicamente el crecimiento de la economía mundial es generalizado, incluyendo a los países de economía avanzada y de economía emergente, y está determinado por una fuerte recuperación del consumo. Se observa una recuperación de EE.UU. de 2%; en la zona euro de 1,9%; en Rusia, 1,6%; y en China, que alcanzó un crecimiento importante al mantenerse en 6,5%. A su vez, a nivel regional se observa una recuperación importante de Brasil y Argentina.
Hizo mención luego a la recuperación del dólar en el mundo en los dos últimos años y dijo que en 2017 es más gradual de lo previsto. En Uruguay, a octubre pasado mostró una caída de 4%.
Cortelezzi comentó también el leve repunte de los precios internacionales como resultado de la recuperación económica y una reducción de las ofertas.
Según FAO, incidieron al alza los lácteos (12%); las carnes (10%); y los cereales (7%). Pese a ese repunte, los precios están todavía por debajo del promedio de los últimos tres años.
La técnica de Opypa dijo también que la economía local continuó expandiéndose. En particular en el último trimestre julio-setiembre hubo un crecimiento de 2,1% interanual. A su vez, si se miran los últimos nueve meses, de enero a septiembre, el crecimiento es de 3% en relación a igual período anterior. En estos últimos nueve meses los que empujaron a ese crecimiento fueron transporte y comunicaciones y comercio.
El crecimiento está basado en una evolución favorable del consumo, en tanto que se observa que la inversión se contrae desde hace dos años, lo que genera un alerta particularmente en el sector privado.
Pero la recuperación económica que "puede ser incipiente" no se transmite con grandes mejoras en el mercado laboral, que viene en tendencia decreciente desde hace dos años; desde 2014 se han perdido de 32 mil a 34 mil empleos, la mitad de ellos en la industria manufacturera.
Cortelezzi destacó la recuperación de las exportaciones por el aumento de los volúmenes comercializados de alrededor de 5%, con las exportaciones de productos agroindustriales se mantendrán relativamente constantes en valores, comparado con 2016.
Por otra parte, los precios de exportación de los principales productos que exporta Uruguay analizados desde 2014 muestran fuertes oscilaciones, sobresaliendo los lácteos, que este año registran una recuperación de 25%, pero luego de experimentar una fuerte caídas en los años anteriores.
Crece el PIB sectorial y se estanca. El PIB agropecuario cerrará 2017 con un crecimiento de 0,5%, según las estimaciones de Opypa, que a su vez adelantó para 2018 un crecimiento de apenas 0,01%, que puede interpretarse como un estancamiento.
Pese a ello, la economista Cortelezzi resaltó la recuperación de la economía mundial mejor que lo esperada, que puede tener efectos positivos sobre la economía uruguaya y particularmente sobre su actividad exportadora de productos agropecuarios.