En septiembre la Unión Europea bajó a entre 4,5% y 8,1% sus tasas sobre la importación del biodiésel argentino, desde el nivel de entre 22% y 25,7% que había establecido en 2013.

Buenos Aires. Las exportaciones de biodiésel argentino a la Unión Europea totalizaron unas 600.000 toneladas entre septiembre y mitad de enero, luego de que el bloque redujera los aranceles que mantuvieron al país austral fuera de ese mercado por años, según datos de Carbio, la mayor cámara local del combustible, enviados este lunes a Reuters.

Argentina es uno de los mayores exportadores de biodiésel del mundo, pero su industria ha sufrido virtuales bloqueos como consecuencia de acusaciones de dumping y de subsidios a la producción.

El biodiésel de Argentina es elaborado en base a aceite de soja obtenido a bajos precios porque es producido en el país.

En septiembre la Unión Europea bajó a entre 4,5% y 8,1% sus tasas sobre la importación del biodiésel argentino, desde el nivel de entre 22% y 25,7% que había establecido en 2013.

Pero la Comisión Europea lanzará esta semana una investigación para determinar si los productores argentinos que exportan biodiésel se están beneficiando de subsidios injustos, según personas familiarizadas con el caso.

En noviembre, el principal asesor de Carbio estimó que los embarques de biodiésel argentino a la Unión Europea alcanzarían al menos 500.000 toneladas en 2018.

Carbio representa a los mayores exportadores de biodiésel de Argentina, entre ellos gigantes como Bunge, Cargill y Louis Dreyfus. El país sudamericano es también el mayor proveedor internacional de aceite de soja.