El oleoducto embarca cerca de un cuarto del petróleo iraquí desde los campos cercanos a la ciudad de Kirkuk hacia el puerto mediterráneo de Ceyhan.
Londres. Las exportaciones de petróleo iraquí a través de Turquía se detuvieron completamente este martes tras un ataque contra un oleoducto el domingo, en un hecho que aumenta el temor por la oferta global de crudo.
El oleoducto embarca cerca de un cuarto del petróleo iraquí desde los campos cercanos a la ciudad de Kirkuk hacia el puerto mediterráneo de Ceyhan y suele ser blanco de ataques del Partido de Trabajadores del Kurdistán (PKK por su sigla original) en su campaña contra el estado turco.
Los ataques se habían vuelto menos regulares en los últimos meses, lo que dio al mercado la esperanza de que las exportaciones iraquíes puedan subir y ayudar así a compensar un desplome de los embarques iraníes a causa de las sanciones occidentales.
"El aumento en la actividad de sabotaje destaca la inestabilidad en la región, y junto a las crecientes tensiones sectarias en Irak, comienza a generar dudas respecto al ambicioso plan de Irak para aumentar la producción", dijo David Wech de la consultora JBC Energy.
Más de 40.000 personas han muerto en la batalla de 28 años del PKK por más autonomía para los cerca de 14 millones de kurdos que se cree viven en Turquía.
El ataque más reciente ocurrió en la provincia de Mardin, en el norte de la frontera de Turquía con Siria, y disminuyó los flujos de crudo a partir del domingo, aunque funcionarios petroleros de Irak han dicho que aún se realizaban algunos cargamentos desde tanques terrestres en Ceyhan.
Sin embargo, una fuente de embarcaciones turca dijo el martes que las exportaciones estaban totalmente suspendidas.
"Los buques están esperando ahora debido a una falta de petróleo crudo en los tanques de la costa", dijo la fuente.
El lunes, funcionarios de energía turcos dijeron que las reparaciones en el oleoducto podrían tomar hasta 10 días. También planean desviar los flujos a un segundo ducto, que corre en paralelo al que se encuentra dañado.
El oleoducto entre Kirkuk y Ceyhan suele bombear unos 400.000 barriles diarios, pero los flujos se redujeron a la mitad después de que la región iraquí semi-autónoma del Kurdistán suspendiera los envíos debido a una disputa de pagos con Bagdad.
Kurdistán prometió reanudar las exportaciones este mes si Bagdad salda las deudas.
"En el plazo más corto, el cese de los flujos de petróleo se produce en un mal momento para Europa, ya que la región lucha por encontrar alternativas relativamente ligeras para los volúmenes iraníes", dijo Wech.