La compañía es conocida como una de las de mayor relevancia global en el negocio de los trenes, y entre las tres o cuatro principales fabricantes mundiales de aeronaves.

El fabricante aeronáutico y de trenes canadiense Bombardier destacó este domingo en Panamá el interés en la concreción de negocios en América Latina, región que la compañía estima que requerirá de casi 1.000 aviones con una capacidad de entre 70 y 150 pasajeros en los próximos años.

El vicepresidente de mercadeo comercial de aviones de Bombardier, Philippe Poutissou, reconoció, en entrevista con Xinhua, la importancia de este mercado para la compañía, tras haber llegado a la capital panameña a participar esta semana en una reunión de la Asociación Latinoamericana de Transporte Aéreo (ALTA).

Bombardier es conocida como una de las compañías de mayor relevancia global en el negocio de los trenes, y entre las tres o cuatro principales fabricantes mundiales de aeronaves.

Si bien Poutissou reconoció que los aviones que fabrica Bombardier son más pequeños que modelos de las familias de aviones de fabricantes como el europeo Aiurbus o el estadounidense Boeing, consideró que pueden tener una buena oportunidad para servir a las regiones y ciudades secundarias en esta parte del mundo, y conectarse con la red de líneas aéreas.

Expresó que aviones como el turbo hélice Q400 de Bombardier pueden ser útiles para conectar rutas más cortas, en donde hay necesidad de operar en un ambiente de montaña, con vuelos a través de la Coordillera de los Andes, por ejemplo, y llegar a aeropuertos con pistas cortas.

El ejecutivo expresó que con la producción de aeronaves serie C se va a poner a disposición una nueva tecnología para los mercados con la necesidad de aeronaves de entre 100 y 150 asientos en América Latina, y para poder cubrir vuelos interregionales.

Poutissou no precisó en el momento el tamaño que representa América Latina en el negocio de Bombardier.

Los aviones turbo hélice son, según el especialista, para vuelos principalmente locales de hasta dos horas, mientras que a las aeronaves de la serie C se les atribuye una autonomía de casi 3.000 millas náuticas, alrededor de seis horas de vuelo.

Según Poutissou, Latinoamérica tiene una clase media que está en crecimiento, por lo que hay mucha demanda para viajar en avión.

"Pensamos que la importancia de Latinoamérica va a crecer para nosotros. Hablamos mucho de China y de Asia, pero Latinoamérica tiene una población y una economía, por lo que va a necesitar de mucho más transporte aéreo", reiteró el representante de la empresa.

Su compañía atiende requerimientos en materia de aviones comerciales, para vuelos privados o empresas que trabajan en proyectos de exploración, como los petroleros.

Durante la reunión de ALTA, realizada este jueves y este viernes pasados, representantes de fabricantes de aviones expresaron a las autoridades de los países de la región la necesidad de mejorar la infraestructura de los aeropuertos en esta parte del mundo, muchos de los cuales tienen problemas de congestionamiento.

Según empresas como Airbus, es necesario mejorar la capacidad de aeropuertos como el de Sao Paulo, en Brasil, para atender los requerimientos por la nueva familia de aviones de mayor tamaño que se está construyendo.