Amalia Lacroze de Fortabat, conocida como "Amalita" y "La Dama de Cemento", Fortabat vendió la mayor cementera del país, Loma Negra, al gigante brasileño Camargo Correa por unos US$1.000 millones en 2005 para dedicarse por entero a la filantropía.
Buenos Aires. Amalia Lacroze de Fortabat, una de las mujeres más ricas de Argentina, murió este sábado a los 90 años en su casa de Buenos Aires, informó su familia.
Conocida como "Amalita" o "La Dama de Cemento", Fortabat vendió la mayor cementera del país, Loma Negra, al gigante grupo brasileño Camargo Correa por unos US$1.000 millones en el 2005 para dedicarse por entero a la filantropía y a consolidar su vasta colección de arte.
Era hija de una familia de clase alta que tuvo al francés como primer idioma y nieta del constructor de la primera red de tranvías de Argentina.
En 1976 asumió la conducción de Loma Negra tras la muerte de su esposo y se mantuvo a su cargo por casi 25 años.
En la nota en la que informó su muerte, la familia recordó que Fortabat "ejerció un claro liderazgo al servicio del crecimiento y el desarrollo empresario nacional" y que fue "una de las más activas emprendedoras solidarias del país, impulsando innumerables acciones de beneficencia y proyectos sociales".
Su pasión por el arte la plasmó con la construcción de uno de los museos más vanguardistas de América Latina, La Colección Fortabat, enclavado en un edificio de arquitectura moderna en una de las zonas más exclusivas de la capital argentina, Puerto Madero.
Allí se exhiben obras de Chagall, Dalí, Miró y Warhol, entre otros, un acervo que constituye el mayor legado público de la empresaria.
Durante décadas Fortabat fue una de las mujeres más poderosas de Argentina y llegó a ser nombrada embajadora itinerante del país.
Recibió múltiples condecoraciones y reconocimientos, y fue miembro del directorio del Museo de Arte Metropolitano de Nueva York.
Su funeral será estrictamente privado, dijo la familia.