Las fallas de distribución se escapan de las manos de los dueños de estos comercios, quienes han tenido que improvisar para elaborar los productos más buscados desde mediados de 2013.

"No hay pan por falta de harina" advierte un cartel pegado en una panadería del sector La Cruz en Las Adjuntas. La salvedad deja claro a los clientes que el pan canilla y el campesino no llegan a su mesa por problemas de abastecimiento.

Las fallas de distribución se escapan de las manos de los dueños de estos comercios, quienes han tenido que improvisar para elaborar los productos más buscados desde mediados de 2013.

"Parece que no hay trigo por eso nos toca pagarlo más caro al distribuidor que lo tenga", replicó el propietario de una panadería en La Urbina que bajó su venta de pan porque el ingrediente principal escasea.

Los asiduos clientes ya conocen la dinámica por lo que prefieren acudir bien temprano a los comercios antes que se acaben los pocos bollos que fueron horneados. En La tarde se repite la operación; ir antes de las 7 pm para poder comprar el pan para cenar.

"Ni Cargill de Venezuela ni Monaca tienen trigo, eso es lo que se dice desde el año pasado. Los distribuidores afirman que en febrero se normaliza la situación", indicó el dueño de otro comercio en la avenida Rómulo Gallegos.

Entretanto seguirán racionando las bandejas diarias hasta que se estabilice la distribución de la harina.