La petrolera estatal costarricense Recope y China National Petroleum Corp., de China, han formado un emprendimiento conjunto para la posesión de la refinería mejorada, que cuya concesión se le entregará a Recope para que la opere.
Pekin. Las negociaciones sobre la largamente esperada modernización de una refinería en Costa Rica, que sería financiada parcialmente por China, están detenidas por los términos de inversión, dijo este miércoles la presidenta costarricense y el proyecto será tema principal durante su visita a Pekín esta semana.
La expansión de la única refinería de Costa Rica a 65.000 barriles por día desde 25.000 bpd es prioridad para la nación centroamericana, que hace cinco años fue la primera de la región en iniciar relaciones diplomáticas con China, rompiendo lazos con Taiwán.
Costa Rica espera que el proyecto le permita reducir los fondos usados para la importación de combustible al importar y refinar crudo en vez de adquirir productos refinados más onerosos.
La expansión planificada le permitiría satisfacer la mayor parte de su demanda doméstica.
Estaba previsto que la mejora en la planta estuviera completa para finales del 2013, pero las dos petroleras estatales siguen discutiendo sus inversiones y retornos respectivos.
"A diferencia de otros países donde proyectos de esta magnitud puede progresar un tanto más rápidamente, en Costa Rica hemos estado intentando por sobre todo comprometer el mejor plan de financiamiento posible, y también la revisión ambiental es de gran importancia, por lo que a veces eso toma tiempo", dijo la presidenta Laura Chinchilla.
"Pero dada la importancia del proyecto, confío en que podemos concluir estos procesos para finales de año e iniciar la construcción", dijo Chinchilla a la prensa.
El proyecto tendría un costo alto, una estimación previa lo establece en 1.240 millones de dólares, porque la refinería estaría configurada para producir casi en su totalidad productos ligeros como diésel y gasolina.
"Este es un proyecto muy importante para el Gobierno costarricense, y las autoridades chinas han reiterado su deseo de seguir adelante con él", agregó la mandataria.
La petrolera estatal costarricense Recope y China National Petroleum Corp., de China, han formado un emprendimiento conjunto para la posesión de la refinería mejorada, que cuya concesión se le entregará a Recope para que la opere.
El año pasado, la agencia china de planificación, la Comisión Nacional de Reforma y Desarrollo, aprobó la inversión de CNPC en el proyecto.
Jorge Villalobos Clare, presidente de Recope, dijo que una vez que concluya el acuerdo de arrendamiento, CNPC tendrá la posibilidad de presentar una estimación final de costos por la refinería, que tendría que ser revisado por el lado costarricense.
Esta semana, Chinchilla tratará el proyecto en reuniones con el Banco de Desarrollo de China, que el año pasado se comprometió a otorgar 900 millones de dólares para la expansión.
Los fondos remanentes serían aportados por bancos de Costa Rica y con una parte de inversión directa de los socios.
La visita de Chinchilla, de una semana de duración y a un año de que los dos países firmaran un acuerdo de libre comercio, también comprende negociaciones para permitirle a Costa Rica enviar productos agrícolas a China y una visita al Suzhou Industrial Park, en el que el Gobierno de Singapur tiene inversiones, para tomar ideas para parques industriales que se proyectan en Costa Rica.
China está construyendo lentamente lazos de comercio y de inversión con América Latina, una región que tradicionalmente ha estado bajo la sombra política y económica de Estados Unidos.
CNPC también evalúa invertir en una refinería cerrada de Valero, en Aruba, y en una refinería que se está planificando en Ecuador las petroleras estatales de Ecuador y Venezuela, como parte de su incursión en mercados de productos de petróleo en América.