El gobierno puso en duda que vaya a pagar a la empresa española Abertis y Aena los US$90 millones que reclama por la nacionalización de sus acciones en SABSA.
La Fiscalía reveló este martes que la empresa Servicios de Aeropuertos Bolivianos SA (SABSA) tenía ingresos mensuales de hasta US$3 millones por los tres aeródromos que estaban bajo su administración. Estos recursos provenían no sólo de la tasa aeroportuaria, sino de otros servicios.
El fiscal de la División Corrupción Pública, Aldo Ortiz, informó a La Razón que el dato de los ingresos corresponde a una investigación que realiza desde fines de 2012 a dicha empresa, filial de la española Abertis y Aena, que fue nacionalizada el martes por el gobierno con el argumento de que no realizó inversiones de ampliación y mejoras en los aeropuertos de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz a su cargo.
“De acuerdo a los hechos denunciados, se entiende que en los tres aeropuertos mensualmente había un ingreso promedio de tres millones de dólares”, precisó el fiscal Ortiz.
Tras la nacionalización de SABSA, Ortiz realizó un operativo (con presencia de notarios) a las oficinas centrales de la empresa y logró secuestrar Bs 294.552 (US$42.320) y $US$51.715, dinero que luego fue precintado y llevado a las bóvedas de la Dirección de Administración Financiera del ministerio Público. “Se ha podido secuestrar montos de dinero que corresponden a los días viernes, sábado y domingo. De acuerdo a lo referido, serían del pago de las tasas aeroportuarias”.
Ortiz indicó que al menos diez personas (entre ejecutivos, gerentes y accionistas) son investigadas, de las cuales cuatro declararán entre este miércoles y el viernes, y otros cuatro la siguiente semana. Se los acusa de incumplimiento de contrato y enriquecimiento ilícito. La denuncia fue presentada por los trabajadores de la empresa SABSA.
De los ingresos mensuales que percibía SABSA, de acuerdo a contrato, un 20,8% debió destinarse a la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea (AASANA), indicó el fiscal y añadió que fuera de esos recursos existía el compromiso de “reinvertir” en las ampliaciones de los aeropuertos y comprar equipos contra incendios, porque el que tenían pertenecía a AASANA.
“Se ha visto que estaban utilizando un equipo (carro bombero) que aún tenía las placas de hace unos 20 años”, indicó Ortiz, quien solicitó a SABSA los informes auditados de los años 2010 a 2012 para someterlos a peritaje.
El secretario general del Sindicato de Trabajadores de SABSA en Cochabamba, Boris Terceros, reveló ayer que 11 ejecutivos de esa empresa se quedaban cada mes con el 50% de los Bs 600 mil (US$83.808) de la planilla de salarios.
“La planilla de SABSA en Cochabamba era de Bs 600 mil aproximadamente. De los Bs 600 mil, 300 mil (US$41.904) se iban en 11 ejecutivos de los 78 trabajadores de acá”, dijo a los periodistas.
Por su lado, el secretario general del Sindicato de Trabajadores de AASANA, Aldo Amaral, destacó la nacionalización de SABSA, pero mencionó que su sector tiene algunas observaciones sobre la medida, porque el manejo de la filial española debería ser revertido a AASANA, ya que la administración de los aeropuertos de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz le fue concedida el 16 de octubre de 1968.
El gobierno desestima el pago de US$90 millones. El gobierno puso este martes en duda que vaya a pagar a la empresa española Abertis y Aena US$90 millones que reclama por la nacionalización de sus acciones en SABSA, debido a que ésta incumplió las inversiones que acordó en 2006 con el ministerio del área.
En conferencia de prensa, el ministro de Obras Públicas, Vladimir Sánchez, argumentó que SABSA, filial en Bolivia de la firma española, sólo invirtió US$5 millones en los aeropuertos que se adjudicó (en 1997) a un valor de Bs 26.500, cuando su precio sobrepasaba los US$430 millones, por lo que mal pueden reclamar esos US$90 millones, informó ayer la Agencia de Noticias Fides (ANF).
“Tenemos 180 días para contratar a una empresa y haga una evaluación, y será la empresa que nos diga si nosotros (el Estado boliviano) vamos a pagar, cuánto o en la práctica cuánto ha dejado de invertir SABSA, y ése va a ser un argumento importante para poder demostrar que nosotros tenemos la razón”, aseveró Sánchez.
Desde Madrid, España, el consejero delegado de Abertis, Francisco Reynés, consideró que esos US$90 millones serían “una justa compensación” tras la expropiación de su filial aeroportuaria en Bolivia, informó la agencia AFP.
Se invertirán US$19 millones en aeropuertos. Tras la nacionalización de las acciones de Abertis y Aena en SABSA, el gobierno señaló que invertirá US$19 millones en los próximos tres años para mejorar los servicios en los aeropuertos internacionales de El Alto, Jorge Wilstermann y Viru Viru.
El ministro de Obras Públicas, Vladimir Sánchez, indicó que esa inversión a corto plazo se destinará a mejorar y recapar la pista de aterrizaje del aeródromo de El Alto, que costará US$10 millones.
Dijo que también se adquirirán para esa terminal aérea tres carros bomberos, puesto que los existentes están “casi obsoletos”. Detalló que cada uno vale US$1 millón.
Asimismo, indicó que se ampliará y se mejorará la sala de preembarque y de llegadas de vuelos internacionales de los aeropuertos de El Alto y de Viru Viru. El costo total será de US$4 millones.
Añadió que se colocarán las mangas de la terminal Jorge Wilstermann con una inversión de US$2 millones. “Tenemos que realizar una inversión de corto plazo de US$19 millones (...). El corto plazo significa entre uno y tres años”.
Puntualizó que los fondos para la inversión provendrán de los ingresos que generen los tres aeródromos. El lunes, Sánchez indicó que se aplicará un programa de inversión de US$56 millones en los próximos años para mejorar los servicios aeroportuarios.
Manifestó que se está revisando si el monto de inversión que realizó la española “era real”, porque “hay algunos indicios” de una posible doble contabilidad.
El ministro anunció que se convocará la próxima semana al grupo español para negociar la indemnización, previa valuación de sus acciones. Afirmó que la ATT demostró que con las tarifas establecidas, por los servicios que prestaba SABSA, la firma “obtenía utilidades extraordinarias y tenía recursos suficientes” para invertir.