Por invitación de la Unión Europea, la cámara envió un equipo de negociación y presentó planes de compromisos de precios pragmáticos, pero la parte de la UE los rechazó, negándose a responder preguntas de la parte china.
Beijing. La primera ronda de negociaciones diseñada para solucionar la actual disputa comercial sobre paneles solares entre China y la Unión Europea (UE) terminó sin resultados, señalaron funcionarios de comercio chinos involucradas en las conversaciones.
China y la UE habían acordado que las conversaciones para determinar un precio de los productos de exportación se sostendrían entre los representantes del sector solar chino y de la UE, dijo en una conferecia de prensa Wang Guiqing, subjefe de la Cámara de Comercio de China para la Importación y Exportación de Maquinaria y Productos Electrónicos.
Por invitación de la UE, la cámara envió un equipo de negociación y presentó planes de compromisos de precios pragmáticos, pero la parte de la UE los rechazó, negándose a responder preguntas de la parte china, señaló.
De acuerdo con un comunicado publicado en el sitio de internet de la cámara, la UE no mostró sinceridad para enfrentar los problemas, lo que condujo al rompimiento de las conversaciones.
La mayoría de las empresas de energía solar chinas y europeas esperan que los problemas actuales se solucionen mediante negociaciones y que la UE debe actuar sinceramente en las negociaciones adicionales con los representantes chinos sobre los compromisos de precios.
Wang no reveló cuándo o dónde se llevaron a cabo las conversaciones o algún otro detalle de lo que se discutió.
El compromiso de los precios significa básicamente que los exportadores aumenten los precios de exportación de un producto para evitar la posibilidad de un arancel antidumping.
La UE respaldó una propuesta a principios de mayo de imponer aranceles de importación punitivos a los paneles solares de China para evitar lo que llamó "el comercio desleal" de los productos de paneles chinos en el mercado europeo.
Las medidas punitivas todavía tienen que ser revisados por los países miembros de la UE y ser publicadas en el diario oficial de la UE antes de entrar en efecto.