La operación corona la mayor adquisición de China sobre un fabricante extranjero.

Pekín/Hong Kong. La automotriz china Geely dijo este lunes que completó la compra de la unidad Volvo de Ford Motor, por US$1.800 millones (1.380 millones de euros), coronando la mayor adquisición de China de un fabricante extranjero.

El acuerdo, que vería la adquisición de Volvo por parte de la casa matriz de Geely Automobile, de propiedad privada, refleja en muchos sentidos también el rápido crecimiento de China en el escenario mundial de automóviles, tras pasar a Estados Unidos para convertirse en el principal mercado de automóviles.

El valor final del acuerdo estará cerca de la cifra previamente anunciada, aunque el valor real podría variar dependiendo del tipo de cambio.

Geely, que comenzó a fabricar automóviles en 1986, dijo la semana pasada a Reuters que había recibido todas las aprobaciones necesarias del Gobierno para el acuerdo, incluso del Ministerio de Comercio y el Planificación estatal.

Tras el cierre del acuerdo, el verdadero desafío para Gelly se encuentra en el futuro en momentos en que tratar de restaurar las ganancias de Volvo a largo plazo. La unidad de automóviles de Volvo publicó ganancias de US$12.400 millones en 2009 mediante la venta de 334.000 automóviles, pero registró una pérdida antes de impuestos de US$653 millones.

Los planes de Geely incluyen utilizar la placa de identificación sueca para producir marcas de lujo en China, mientras mantienen sus operaciones en Europa para proveer al mercado internacional.

¿Equipado para el éxito? A pesar del triste record de China en las fusiones y adquisiciones extranjeras, Geely podría estar mejor preparada para el éxito debido a su experiencia en trabajar con socios extranjeros.

Su historia incluye la adquisición del fabricante australiano de cajas de cambio Drivertrain System International y su alianza con el fabricante de taxis británicos Manganese Bronze, dijo el analista de IHS Automotive, John Zeng.  

"Geely no es un principiante en fusiones y adquisiciones mundiales como mucha gente cree", dijo.

"En China, Geely se estableció como un fabricante masivo en el mercado de automóviles, la adquisición de Volvo le brinda la oportunidad para llevarlo al próximo nivel", añadió.

El presidente de Geely, Li Shufu, quien tuvo sus inicios en piezas de refrigeradores y motocicletas y ha sido apodado desde entonces como el Henry Ford de China, ya ha sido designado presidente de Volvo.

Los medios alemanes informaron el mes pasado que Stefan Jacoby, un ex ejecutivo estadounidense de Volkswagen AG ha sido contratado para convertirse en el nuevo consejero delegado de Volvo.