Tricio, principal accionista individual de la aerolínea, figura entre un grupo de accionistas que adquirieron de manera independiente una porción de las acciones vendidas por Citigroup.
Luego de casi ocho años en Aeroméxico, Citigroup resolvió su salida de la empresa al acordar la venta de 16% de las acciones en circulación que poseía de la misma, lo que viene a fortalecer la posición accionaria de la familia Tricio, y de la socia estadounidense de la aerolínea mexicana, Delta Air Lines.
De acuerdo con el reporte 2014 de Aeroméxico, el empresario lechero Eduardo Tricio Haro -quien ocupó hasta hace algunas semanas el cargo de presidente del consejo de administración de la empresa- se convirtió en su mayor accionista luego de que el 12 de febrero del 2013 encabezara junto con otros inversionistas la compra de aproximadamente 20,19% del capital de la sociedad.
Ayer, la emisora informó a la Bolsa Mexicana de Valores que diversos accionistas, entre los que se encuentra Tricio Haro, adquirieron de manera independiente una porción de las acciones vendidas por Citigroup, “sin que ninguno de ellos haya adquirido en esta fecha más de 5% de las acciones en circulación”.
Asimismo, comunicó que Barclays Capital Securities Limited adquirió 8% de las acciones desprendidas de Citigroup, “en relación con una operación financiera derivada celebrada con Delta Air Lines, que se podría ejercer o no en acciones de la compañía”.
De ejercer la opción de compra, la aerolínea estadounidense elevaría su participación accionaria en Aeroméxico hasta casi 13%, luego de que se volviera socia de la mexicana en el 2012 con la compra de 4.17% accionario de la sociedad, porcentaje que ha crecido al día de hoy hasta 4.9% luego de ejercer opciones de compra posteriores.
De acuerdo con fuentes de la industria, la posibilidad de que Delta ejerza o no lo opción de compra del 8% accionario del principal grupo de transportación aérea de nuestro país, dependerá de si las autoridades mexicanas y estadounidenses aceptan o no la solicitud de alianza de ambas aerolíneas bajo la figura de inmunidad antimonopolio, misma que les permitirá compartir activos para elevar eficiencias y así consolidar su posición de mercado.
Dicha solicitud deriva del acuerdo aéreo bilateral pactado por México y Estados Unidos a finales del año pasado, el cual, entre otras cosas, también flexibiliza las condiciones para la apertura de rutas entre ambos países.
El adiós de Citi. La participación de Citigroup en Aeroméxico se remonta a octubre del 2007, cuando junto con un grupo de 16 inversionistas nacionales adquirieron 100% de las acciones de la aerolínea, que durante los 19 años previos se mantuvo bajo control estatal, a través de la Corporación Internacional de Transporte Aéreo (Cintra), que también controlaba a la extinta Mexicana de Aviación.
Apenas a finales del mes pasado, Eduardo Tricio cedió la presidencia del consejo de Aeroméxico a Javier Arrigunaga, consejero de la empresa que se desempeñó como director general de Citigroup México (Banamex) hasta principios de octubre del 2014.