Según el administrador, Roberto Murillo, nuevos dueños sí deberán realizar otras inversiones, pues existen proyectos importantes que el administrador prefirió retrasar, ante la inminente venta.
Quito. El Estado invirtió el año pasado US$8 millones en el ingenio azucarero Ecudos, que fue incautado a los Isaías en el 2008.
Así lo comentó Roberto Murillo, actual administrador de la empresa que se encuentra en pleno proceso de transición a los nuevos dueños, el Grupo Gloria de Perú y Consorcio Azucarero Ecuatoriano (Coazúcar).
Según Murillo, los nuevos dueños sí deberán realizar otras inversiones, pues existen proyectos importantes que el administrador prefirió retrasar, ante la inminente venta.
El ingenio venderá este año unos US$3 millones de sacos, una cifra por sobre la meta preliminar que fue de US$2,9 millones.
Pese a estos números, la administración de Ecudos, en manos del gobierno ha tenido tropiezos.
Cristian Bermeo, secretario del Comité de Empresa, denunció que el ingenio empezó a importar azúcar para compensar la baja producción.
Los trabajadores dudan sobre la compra del 30% del paquete accionario, que está pendiente, pues no quieren que las utilidades se usen para ese menester.
El ingenio primero llamado Aztra (Azucarera Tropical Americana); luego Ecudos y finalmente EQ2, ha pasado dos veces de manos estatales a privadas.
La primera en 1994 cuando era Aztra, de propiedad del Estado y fue comprado por los hermanos Isaías.
La segunda, hace pocas semanas, cuando tras haber sido incautada a los Isaías, ex dueños de Filanbanco, pasó al Estado y ahora fue vendido al consorcio de empresas peruanas y ecuatorianas (Coazúcar-Grupo Gloria) en US$133 millones.
En ambas ocasiones, el proceso dejó dudas. En el caso reciente, las condiciones de venta con un financiamiento por parte de la CFN, ente público, del 90% del costo de la empresa a quince años plazo (con una tasa de interés del 5%) y el bajo precio, pese a ser dueña de una importante cuota del mercado; así como el uso de papeles “sin valor” (según dicen funcionarios de Gobierno), crean interrogantes.
El proceso ha sido calificado como una “ganga” (por analistas como Marcos López, exdirector del Banco Central) para los compradores, quienes con apenas US$ 13 millones lograron el negocio.
Según Diego Delgado Jara, abogado de los trabajadores de Aztra, el proceso de venta de 1994, durante el Gobierno de Sixto Durán-Ballén, significó un perjuicio al Estado porque los Isaías pagaron 1,14% del valor de la empresa y luego de la transferencia recibieron una caución equivalente al 500% de lo que habían invertido.
Negociación de azucarera. El 14 de este mes se vendió el 70% de acciones del Holding Ecudos al consorcio de empresas peruanas y ecuatorianas (Coazúcar-Grupo Gloria).