La liquidez extra podría ser usada para financiar varias metas estratégicas de GM, que incluyen alcanzar el punto de equilibrio en Europa para mediados de la década y la posible compra de las operaciones de Ally Financial en Europa y Latinoamérica.
Detroit, EE.UU. General Motors Co (GM) se aseguró una línea de crédito renovable por US$11.000 millones, lo que duplicará el colchón financiero y fortalecerá todavía más la hoja de balance de la mayor automotriz de Estados Unidos.
La liquidez extra podría ser usada para financiar varias metas estratégicas de GM, que incluyen alcanzar el punto de equilibrio en Europa para mediados de la década y la posible compra de las operaciones de Ally Financial en Europa y Latinoamérica.
Los nuevos fondos reemplazan una línea de crédito actual por US$5.000 millones de GM que la compañía consiguió hace más de dos años cuando se preparaba para su Oferta Pública Inicial en noviembre del 2010.
El programa ofrece mejores condiciones y precios, además de la posibilidad de tomar créditos en otras monedas además del dólar, dijo este lunes GM en un comunicado.
"La nueva línea renovable brinda una fuente significativa de respaldo de liquidez y flexibilidad financiera, mejorando aún más la situación de nuestra hoja de balance", dijo en el comunicado el presidente financiero de la compañía, Dan Ammann.
Treinta y cinco bancos de 14 países, liderados por JPMorgan Chase & Co y Citigroup Inc, participaron en el acuerdo.
El acuerdo le otorga a GM una línea de crédito comparable a aquellas con las que cuentan otras compañías de similar tamaño, dijo el portavoz de GM Dave Roman. Ford Motor Co, la segunda más grande automotriz estadounidense, amplió a US$9.300 millones su línea de crédito este año.
La nueva línea de crédito de GM consiste en una línea de US$5.500 millones a tres años y otra por el mismo monto que vence en noviembre del 2017. Su línea de crédito anterior, de US$5.000 millones, vencía en el 2015.
A comienzos de este año, GM buscaba una línea de crédito de hasta US$10.000 millones, de acuerdo a personas familiarizadas con el asunto.
El gobierno estadounidense inyectó US$50.000 millones en GM durante la crisis financiera para ayudar a la automotriz a evitar su liquidación. Durante la OPI de GM, el Tesoro estadounidense redujo casi a la mitad su participación en la automotriz.