“La planta está en proceso de mantenimiento hasta la semana que viene. De momento no se está ensamblando”, dijo Gilberto Troya, secretario general del Sindicato de Trabajadores de Ford de Venezuela, quien destacó que la firma cuenta con material para ensamblar unas 1.200 unidades.
Tras la momentánea paralización de actividades antes de Semana Santa, las plantas de Ford Motor y General Motors Venezolana (GMV) reanudarán labores próximamente, aunque seguirán laborando a capacidad reducida, como medida para extender la escasa existencia de material de ensamblaje.
“La planta está en proceso de mantenimiento hasta la semana que viene. De momento no se está ensamblando”, dijo Gilberto Troya, secretario general del Sindicato de Trabajadores de Ford de Venezuela, quien destacó que la firma cuenta con material para ensamblar unas 1.200 unidades.
Aunque dijo que la decisión de cómo será distribuido el material no ha sido informada, Troya señaló que las estimaciones apuntan a que este mes se ensamblarán unas 300 unidades. “Eso significa trabajar a 1% de la capacidad instalada de la planta”, dijo.
Pese a la contracción de las actividades, el dirigente sindical aseguró que todos los trabajadores siguen recibiendo sueldo completo y todos los beneficios de ley estipulados en el contrato colectivo.
Por otra parte, Troya dijo que se desconocen los alcances de la alianza estratégica firmada entre el Gobierno y Ford. “No tenemos información. Hay aspectos del acuerdo que no se han especificado. Nos han dicho que se informará solo cuando se tengan todos los detalles”.
GMV también se reactiva
A su vez, Fidel Ampueda, secretario de Reclamos del Sindicato de Vencedores Socialistas de General Motors Venezolana (Sinvensoc GMV), informó que la planta valenciana reanudará actividades una vez que reciba el material que se encuentra en el puerto de Puerto Cabello, actualmente en proceso de nacionalización.
Ampueda fue enfático al afirmar que la empresa no ha paralizado actividades, pues se realizan labores de mantenimiento, de reparaciones y administrativas.
“Esta semana no se ha ensamblado pero se prevé que para la próxima llegará el material”, dijo, acotando que se espera la llegada de material para ensamblar 1.300 unidades: 900 vehículos comerciales y 400 de pasajero; material que sería remanente del adquirido en 2014.
El dirigente sindical reiteró que los aproximadamente 3.000 empleados de planta siguen recibiendo salario completo, bonos nocturnos y de alimentación, lo que a su entender es “una carga muy grande” para la empresa.
“Nos preocupa el futuro inmediato, porque cuando se acabe este material no sabemos que vamos a hacer. Todas las ensambladoras y empresas del sector estamos trabajando a capacidad reducida”, acotó Ampueda.
Cabe destacar que el sector automotor (ensambladoras de autos y motos, autopartistas e importadores) se encuentra a la espera de la liquidación de los más de US$500 millones adjudicados a través de la subasta 26 del Sicad efectuada en octubre de 2014; razón por la cual no ha podido hacer nuevos pedidos.
