Las denunciadas son las petroleras Repsol-YPF, Shell, Esso, Petrobras Argentina y Oil, que son investigadas por tener diferencias en los precios que llegan hasta 30% del precio de gasoil a granel.
El vicepresidente Amado Boudou aseguró que con el objetivo de "llevar soluciones a los argentinos es que el gobierno denunció a las petroleras por tener precios más altos para los que compran mayores cantidades de gasoil, como son los micros de corta y larga distancia".
Para explicar los motivos que llevaron al gobierno a denunciar a las petroleras ante los sistemas de defensa de la competencia, por presuntos sobreprecios, Boudou detalló en Radio 10 que "el gasoil tenía un precio en el surtidor y otro, superior, para los mayoristas. Esto no tiene lógica, ya que cuando pedimos más cantidad, pedimos descuento".
En tanto, agregó que al mismo tiempo que se hizo la denuncia, se llamó a las petroleras "para ver cómo se resuelve el problema de aquí para adelante", y dejó claro que "acá lo importante es llevar soluciones a los argentinos".
El 16 de enero, Boudou y el ministro de Planificación, Julio De Vido, informaron que se elevó a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) una denuncia de las ocho cámaras de transporte de pasajeros y de carga, por presunto abuso de posición dominante en el mercado de combustibles por parte de cinco empresas, "con sobreprecios por 3.500 millones de pesos (US$808,9 millones) anuales".
Las denunciadas por las empresas transportistas son las petroleras Repsol-YPF, Shell, Esso, Petrobras Argentina y Oil, que son investigadas por Defensa de la Competencia.
De Vido pidió "que se investigue en profundidad esta distorsión del mercado que afecta al servicio público de cargas y pasajeros", con diferencias en los precios que "llegan hasta 30% del precio de gasoil a granel".