El ministro de Agricultura destacó los recursos que ha comprometido el gobierno en apoyo al sector: tres de cada cuatro pesos que invierte la organización cafetera, los pone el gobierno.
El gobierno garantizó la continuidad del apoyo que viene dando a los cafeteros de Colombia pero insistió en la necesidad de revisar la contribución parafiscal de manera que permita fortalecer el principal instrumento financiero del sector como es el Fondo Nacional del Café.
El anuncio fue hecho por el ministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo Salazar, al explicar que el café es el gran motor de la actividad económica en las zonas rurales de Colombia en donde genera uno de cada tres empleos agrarios.
“El gobierno se la ha jugado y se la sigue jugando a fondo, para apoyar la caficultura porque reconoce la importancia social que tiene y seguirá teniendo y porque el café continúa cosido al alma colombiana”, afirmó Restrepo Salazar en un debate de control político en la plenaria de la Cámara Representantes.
El jefe de la cartera agropecuaria destacó los recursos que ha comprometido el gobierno en apoyo al sector cafetero: tres de cada cuatro pesos que invierte la organización cafetera, los pone el gobierno. En 2011, entre transferencias y subsidios se entregaron 302.716 millones de pesos mientras que la contribución cafetera aportó 104.951 millones de pesos.
Dijo el ministro que otros sectores agropecuarios están tocando las puertas de las ayudas y reiteró que el gobierno no tiene la capacidad indefinida de inyectar recursos cuantiosos a una actividad que quiere y aprecia mucho.
“Las necesidades fiscales para apoyar sectores amenazados por los Tratados de Libre Comercio son descomunales y no le vamos a dar la espalda a actividades que socialmente también son importantes en Colombia. No los dejaremos a la intemperie”, agregó.
En ese orden de ideas el ministro Restrepo Salazar llamó la atención sobre la necesidad de revisar la contribución cafetera, actualmente en seis centavos de libra exportada.
Sobre su ajuste, dijo que la última palabra la tiene el gremio mismo y que en ese orden de ideas el gobierno no propondrá cambios si los voceros autorizados de los cultivadores no están de acuerdo.
El ministro de Agricultura dijo que el gobierno no tendría reparo técnico alguno en que si se llega a ajustar la contribución cafetera, sobre la que insistió que no es un impuesto, la misma sea partir de un precio disparador mucho más alto del que ha prevalecido.
“La visión del gobierno no es llegar ahora mismo, con un ingreso cafetero deprimido, a agravar la situación con una contribución que, a pesar de que vaya al mismo sector, afecta el ingreso individual”, señaló Restrepo Salazar, en un comunicado de prensa del ministerio de Agricultura.
En el marco del debate, el gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, Luis Genaro Muñoz, recordó que la revisión a la contribución cafetera recibió el visto bueno del gremio en el pasado Congreso Nacional Cafetero.
El ministro Restrepo Salazar se refirió a otros temas de la situación cafetera y de las perspectivas de la actividad y afirmó que “ya se ve la luz al final del túnel” para referirse a la recuperación que se viene dando en la producción del grano que este año bordearía, de acuerdo a estimaciones de las autoridades del sector, los nueve millones de sacos cuando en los últimos cuatro años ha estado por debajo de los ocho millones de sacos.
El ministro dijo que el camino correcto para lo que llamó “desencunetar” la caficultura colombiana en producción, es la renovación con variedades resistentes a la roya política que viene subsidiando el gobierno con muy buenos resultados: el 2011 se renovaron 117 mil hectáreas y en el 2012 se aspira a llegar a 130 mil hectáreas.
El ministro formuló un nuevo llamado al Banco de la República para que intervenga más agresivamente en el mercado cambiario y se ponga freno a la persistente revaluación del peso.
Reveló el ministro que por cuenta de la baja producción, los bajos precios y la revaluación, el ingreso de las 563 mil familias cafeteras se deterioró, en el primer semestre de 2012, entre 800 a 900 mil millones de pesos. Además se debilitaron las finanzas del Fondo Nacional del Café y se afectó la participación de Colombia en los mercados internacionales.
“El gobierno quiere dejar en este debate un mensaje ni de pesimismo extremo, porque ya se empieza a ver la luz al final del túnel, pero tampoco de optimismo desbordante, porque la recuperación será lenta. Todavía nos queda trecho largo para recuperar producción y productividad y para volver a instalar a la Colombia cafetera en un piso superior de los 12 a 13 millones de sacos”, agregó el titular de la cartera agropecuaria, en el informe de prensa.