"Hemos demostrado que sin necesidad de acudir a las vías de hecho (actos fuera de la ley) se puede negociar, este gobierno tiene las puertas al diálogo", declaró el funcionario.
Bogotá. El ministro colombiano del Interior, Juan Fernando Cristo, dijo hoy que el gobierno ofrece todas las garantías de seguridad y respeto a los indígenas y campesinos, quienes iniciaron un paro hace dos semanas en protesta por el incumplimiento de acuerdos.
"Hemos demostrado que sin necesidad de acudir a las vías de hecho (actos fuera de la ley) se puede negociar, este gobierno tiene las puertas al diálogo", declaró el funcionario.
El llamado de Juan Fernando Cristo se da en momentos en que delegados del Poder Ejecutivo y los manifestantes mantienen conversaciones para llegar a un acuerdo.
El ministro colombiano recordó que los diálogos entre las partes se han desarrollando en un buen ambiente y confió que pronto se llega a un acuerdo definitivo.
"Lo importante es que se restableció el diálogo, que se activa la mesa, y vamos a seguir trabajando para los distintos temas", comentó.
Los indígenas y campesinos, quienes mantienen un paro ante el incumplimiento de compromisos firmados con el gobierno en 2013 y 2014 sobre la democratización de la propiedad y la transformación del modelo productivo, despejaron la vía Panamericana por 36 horas tras un acuerdo con la administración del presidente de Colombia, Juan Manuel Santos.
Hace unos días el presidente Santos pidió a los indígenas, campesinos y camioneros que iniciaron el paro en varias regiones del país, no acudir a las vías de hecho, al reiterar que su gobierno está abierto al diálogo para que esas organizaciones suspendan las manifestaciones.
Por su parte el ministro colombiano de Defensa, Luis Carlos Villegas, alertó que la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) se ha infiltrado las protestas sociales.
Unas 13.000 personas, en 13 departamentos del país, mantienen las concentraciones y algunos de ellos han bloqueado el paso en varias carreteras del suroeste, centro y este de Colombia.
Los principales protestas se han presentado en el departamento de Cauca (suroeste), donde indígenas y campesinos bloquearon varios puntos de la carretera Panamericana.
