Según contó a Café & Negocios el gerente de la cadena en Uruguay, Fernando Mino, el éxito que han tenido hasta el momento se debe a tres factores: la accesibilidad, el precio -que en promedio es más bajo que el de la competencia- y la calidad del producto.

Uruguay. Estar en todos los barrios y que salir a tomar un helado sea un paseo cotidiano. Bajo ese lema es que Grido, la mayor cadena de heladerías de Argentina con 1.300 sucursales, decidió expandir su negocio, cruzar el charco y llegar a Uruguay en 2012 bajo el sistema de franquicias. El comienzo fue con nueve locales, y la estrategia de estar presente en todas las localidades tanto de Montevideo como del interior es la misma que utiliza la marca en Argentina.

Actualmente la marca cuenta con 46 locales en Uruguay, entre los que figuran barrios como el Cerro, Paso de la Arena, Piedras Blancas, Colón, Sayago, La Teja, Pocitos, Carrasco.
Pero el plan de expansión es ambicioso. Para este año, la cadena proyecta llegar a los 80 locales y tener presencia en todos los departamentos del país.

Según contó a Café & Negocios el gerente de la cadena en Uruguay, Fernando Mino, el éxito que han tenido hasta el momento se debe a tres factores: la accesibilidad, el precio -que en promedio es más bajo que el de la competencia- y la calidad del producto. “Llegamos a zonas como el Cerro donde no había nada de estas características y nuestros precios son un 50% más baratos que el resto de las heladerías”, dijo Mino.

Los bajos precios son posibles porque Grido cuenta con su propia fábrica, que desde Córdoba produce helado para todos sus locales. Según explicó Mino, son los sextos productores de helado a nivel mundial y esto permite abaratar los costos.

A la presencia en Uruguay, Argentina y Chile, la compañía quiere sumarle países como Paraguay, Bolivia, Perú y Colombia. Aunque todavía no hay nada concreto, ya está analizando esos mercados para determinar si es posible desembarcar allí.

El perfil del uruguayo. Entre los sabores preferidos por los uruguayos están la frutilla, el dulce de leche granizado, el sambayón y la menta granizada. En cuanto a productos, lo que más se vende son los cucuruchos de dos gustos, que cuestan $55 (US$ 2,45), mientras una cassata de un litro sale $200 (US$8,90). En los locales también se pueden encontrar heladeras con la línea de “impulsivos”, donde los bombones y las tortas son los más solicitados.

Aunque la empresa aún no realizó el balance de la temporada, las lluvias torrenciales influyeron negativamente en las ventas. “La lluvia es un enemigo para las salidas a las heladerías; tuvimos alguna baja en las ventas por eso la temporada no fue en un 100% lo que esperábamos”, explicó Mino.

La presencia de carros de la marca en los tablados también se vio opacada por el clima.
Sin embargo, durante los días de playa la marca realizó acciones en las playas con juegos, que fueron premiados con helado.

Combatir el invierno. El uruguayo consume unos tres kilos y medio de helado por año, mientras que los argentinos tienen un consumo anual de cinco kilos y medio, según cifras de Grido. Si a esto se suma que en invierno las ventas bajan un 30%, el panorama fuera de la temporada es complicado.
Sin embargo, para desestacionalizar el consumo de helado la empresa lanzará tres sabores nuevos en marzo -que se sumarán a los 36 ya existentes-: arándanos, naranja al agua y delicias tropicales.

Para promover el consumo en los meses de frío, también se está reforzando el sistema de delivery. El servicio tiene un costo de $ 20 (US$0,89 ) y se puede utilizar con un mínimo de $ 200 pesos (US$8,90) de compra.“Estamos reforzando la cantidad de deliverys para que los pedidos puedan ser entregados en tiempo y forma, así como el servicio del call center”, informó Mino, quien reconoció que el invierno pasado el servicio no fue tan difundido porque estaba en la etapa de “implementación”.

También habrá promociones y algunos productos nuevos en la línea de impulsivos.
Por otra parte, se reforzará la calefacción de los locales para hacer frente a las bajas temperaturas.

Diversificar la oferta. Además de la línea de helados, Grido también tiene el servicio de cafetería que incluye productos panificados como pueden ser medialunas, o su producto estrella del invierno; una capelina que trae un brownie o una torta de manzana con una bocha de helado.Cada una de las franquicias es adquirida por inversores diferentes. El costo varía entre los
US$ 40.000 y US$ 70.000.

Los locales tienen distintas dimensiones que pueden ir desde los 40 metros cuadrados hasta los 150.La empresa calcula que hay diez personas trabajando directamente por cada local.
Según contó Mino, el perfil del franquiciante responde a una persona que es “referente en su zona”, que está “relacionada” al comercio y la mayoría de las veces se maneja el local de forma familiar, respetando así la impronta de Grido (ver recuadro).