En México sus marcas ya no tienen competencia, por lo que la empresa ha tenido que buscar nuevos territorios para seguir creciendo, principalmente en Estados Unidos y Sudamérica.
Ciudad de México. Excelsior.com.mx. Para Grupo Bimbo, México dejó de ser el país más apetitoso debido a su claro dominio del mercado. En el país sus marcas ya no tienen competencia, por lo que la empresa ha tenido que buscar nuevos territorios para seguir creciendo, principalmente en Estados Unidos y Sudamérica.
En 2004, las ventas de la hoy panificadora más grande del mundo, ascendían a 51.545 millones de pesos (US$3.894,1 millones), 67% proveniente de México; el resto venía de Estados Unidos y Latinoamérica (16.998 millones de pesos).
De aquel entonces a la fecha sus ingresos se han disparado 241,5%, a 176.040 millones de pesos, y México solamente representa 41,6%.
Y aunque EU ya representa 45,3% de sus ventas, siendo su mercado más importante, lo cierto es que los mexicanos también han incrementando el consumo de sus productos.
Ya sea porque la empresa panificadora ha adquirido más marcas, o porque ha lanzado nuevos productos, las ventas de Bimbo en el mercado mexicano también se han duplicado. En 2004 eran de 35.651 millones de pesos, al cierre de 2013 ascendían a 73.178 millones de pesos (US$5.528,5 millones).
En estos años, la compañía ha invertido fuertes cantidades en el lanzamiento de nuevos productos, baste señalar que comercializa más de 10 mil y que en México cuenta con marcas que van desde Bimbo, Marinela y Barcel, hasta Ricolino o Tía Rosa, pasando por los dulces Vero y las pastelerías El Globo.
Así, la compañía, además de pan blanco y dulce, comercializa botanas, caramelos y productos con chocolate.
De compras. En los últimos cinco años Grupo Bimbo ha invertido US$5.127 millones en la adquisición de otras empresas del ramo y su meta ha sido clara: convertirse en la panificadora más grande del planeta.
La primera gran operación fue la compra de George Weston Foods en 2009, a la cual destinó US$2.505 millones. Posteriormente, en 2011, adquirió las operaciones de Sara Lee por US$959 millones.
Esta compañía también adquirió Dulces Vero en 2010, aunque no especificó el monto de esta transacción.
Por su reciente compra, anunciada en febrero, la compañía pagará 1.830 millones de dólares canadienses (US$1.663 millones) se trata de Canadá Bread Company, con lo que marca su incursión en Canadá y en Reino Unido, donde también opera la panificadora.
Con la compra de la canadiense, Bimbo obtendrá ingresos anuales adicionales por 1.439 millones de dólares canadienses (US$1.308 millones).
Aunque sus adquisiciones han hecho dudar a los inversionistas sobre la capacidad de pago de la panificadora; de acuerdo con los analistas financieros, a futuro, su reciente adquisición será un incremento significativo en sus ingresos.
Afuera sí lo limitan. Estados Unidos. Bimbo es el número uno en la venta de pan de caja en EU, gracias a la compra de Sara Lee en 2012. Sin embargo, para evitar la dominancia, el Departamento de Justicia le condicionó a que vendiera algunas marcas, activos y rutas en ciertas regiones, lo que le restó ingresos por US$155 millones.
Bimbo vendió las marcas Sara Lee y Earthgrains en California y otras marcas en Pensilvania, Kansas, Oklahoma y Omaha.
Argentina. En 2007, cuando Bimbo reveló su intención de comprar el 70% restante de Fargo, el ente antimonopolios de Argentina condicionó la transacción a la venta de una planta productiva y de la segunda mayor marca comercial de Fargo: Lactal.
El 18 de septiembre, la Comisión de Defensa de la Competencia de Argentina permitió la compra, pero a cambio, Bimbo tuvo que vender también las marcas Trigoro y Sacaan.
España. Grupo Bimbo compite contra 15 marcas libres, como Mercadona y Carrefour, que tienen 61% del mercado, y está condicionada por la autoridad antimonopolio a que no puede tener más marcas en España, o tendría que desinvertir en algunas plantas.