Nils Leporowski, presidente de la Asociación Nacional del Café, explicó las expectativas para las próximas semanas.

El tiempo pasa y los productores no tienen claridad sobre el panorama para el sector cafetalero ante los impactos que ha provocado la roya.

Nils Leporowski, presidente de la Asociación Nacional del Café (Anacafé), explicó las expectativas para las próximas semanas.

- ¿Qué implicaciones tiene una declaratoria de emergencia?

"Una declaratoria de emergencia nacional de parte del gobierno implica poder solicitar recursos a otras instancias o instituciones a las que normalmente no se tiene acceso. La declaratoria de emergencia lo que primero hace es crear un comité para definir las estrategias a seguir para el combate de la enfermedad. En segundo lugar se convierte en una puerta para poder tener acceso a financiamientos de otras instituciones externas que pudieran dar recursos.

Lo que trata de hacer la declaratoria de emergencia es crear conciencia en las instituciones del Estado para que la atiendan, así como reunir a los poderes Ejecutivo y Legislativo con el fin de que ejecuten una política que pueda incidir en el control de la enfermedad".

- ¿Cuál será la participación directa de Anacafé en la emergencia?

"Todos nuestros recursos se pondrán a disposición del control de la roya. Esto significa que el equipo técnico, el de investigación, laboratorios y todo lo económico a nuestro alcance lo vamos a utilizar.

Reduciremos gastos en actividades. En el caso de la subasta electrónica de café, sí la vamos a hacer porque es autosostenible; sin embargo, el Congreso Nacional de la Caficultura, así como varias participaciones en ferias y otros eventos, los cancelamos".

- ¿Qué pasó en la reunión del Consejo de Política Cafetera?

"Es una tristeza que el jueves a la reunión del Consejo de Política Cafetera, con excepción de Agricultura, no llegó un solo ministro. Esta es la única crisis que ha tenido este gobierno y no llegó un solo ministro. Solo viceministros y el vicepresidente del Banco de Guatemala. Ahí se ve que no le están dando importancia al problema y que en Guatemala las prioridades son otras.

Para lograr una declaratoria de emergencia nos tardamos cuatro horas. Y esto fue para que el Consejo de Política Cafetera le diera como sugerencia al presidente que declarara la emergencia.

Durante la reunión no se logró avanzar al siguiente punto de la agenda, que era el del Comité Técnico del Fideicomiso, por lo que se tratará esta semana".

- ¿Cuál debiera ser el papel del Congreso de la República, que fue quien dio vida al fideicomiso del café?

"Como la propuesta de Anacafé es cambiar el destino y el plazo del fideicomiso, y el único que puede hacer esto es el Congreso, tenemos que llegar con una iniciativa de ley para que lo hagan. Esto fue lo que debió hacer el Ministro de Finanzas para utilizar el dinero que usó del Banco de Guatemala. En este caso, que sea la Contraloría General de Cuantas la que investigue si estuvo bien o mal. Yo lo único que quiero es que se ayude a la caficultura".

- ¿Ya se tiene una estrategia concreta para el ataque a la roya?

"La estrategia está fundamentada en los recursos que logremos tener. El problema es que como todavía no tenemos claro esto, es muy difícil planearla. En un principio teníamos una estrategia a corto y largo plazo. En el corto plazo haríamos una lucha frontal a la roya para que todos los productores tuvieran insumos para combatir la enfermedad y de esa manera disminuir el hongo. A largo plazo se dejaría una parte del dinero del fideicomiso como fuente de financiamientos para los productores que necesitarán dinero para fumigaciones extras u otro tipo de trabajo cultural. Se pretendía que por lo menos un año se tuviera una fumigación pareja.

Pero como ahora no contamos con los recursos que teníamos en el Banco de Guatemala, creo que nuestra estrategia se va a basar este año en tratar de combatir la enfermedad y a ver que pasa con la próxima cosecha.Nuestra propuesta se va a basar en los recursos que hay en Banrural, que es lo único que tenemos seguro".

- ¿Cómo se ve que el presidente Otto Pérez haya propuesto que el Maga tenga recursos propios para ayudar a los productores?

"Yo lo veo positivo. Cualquier ayuda que recibamos, por muy pequeña que sea, es buena, pues ahorita no tenemos nada. Si en este momento me preguntaran los caficultores con qué contamos, les diría que les apoyaremos con todos los recursos que tiene en la actualidad Anacafé, entre los que se menciona a los técnicos, pero más allá de eso no tenemos nada, y lo que nos den es ganancia.

Si los recursos se van a manejar a través del Maga (Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación) o de quien decidan, es bueno. Lo importante es que llegue a los productores. Lo que queremos ver es acción y que haya voluntad de ayudar".

- ¿Cual será el contenido del plan de ayuda que prometió el presidente Pérez?

"La declaratoria la va a hacer el Ministerio de Agricultura. El Ejecutivo anunciará en Cobán la declaratoria de emergencia del café, así como un plan de ayuda a la caficultura.

Ese plan de ayuda es lo que todavía no sabemos en qué consistirá y es parte de la agenda de la nueva reunión del Consejo de Política Cafetera de este martes, dentro del Comité Técnico del Fideicomiso.

Esperamos salir de la reunión con un plan de acción, que sería lo que debiera anunciar al presidente en Cobán, el 8 de febrero".

Estrategia  frontal. El objetivo primario de los caficultores es evitar que la roya siga desplazándose.

Los directivos de Anacafé esperan poder utilizar   los Q226,2 millones (US$28,3 millones) del Fideicomiso del Café que estan en el Banco de Desarrollo Rural (Banrural).

Hasta la fecha las estadísticas de Anacafé registran 193 mil hectáreas afectadas por la roya, que equivalen al 70% de los cafetales.

El área de cafetales infectada equivale a 276 mil 188 manzanas.Si el costo para fumigar una  manzana es de Q750, a la fecha se requerirían aproximadamente Q207,14 millones para hacer tres aplicaciones de fungicida.