El primer ministro Joseph Jouthe dijo que el término inicial del estado de emergencia expira en breve y que estaba considerando extenderlo. De cualquier manera, había decidido permitir que el sector de fabricación textil se reactive a partir del próximo lunes.
Puerto Príncipe. Haití reabrirá su vital industria textil la próxima semana, dijo este miércoles el primer ministro Joseph Jouthe, sugiriendo que la empobrecida nación se habría librado de lo peor de la pandemia mundial de coronavirus SARS-CoV2 con la imposición temprana de estado de emergencia.
El país más pobre del hemisferio occidental generalmente sufre dificultades para combatir brotes de enfermedades graves debido a su alta densidad poblacional, falta de infraestructura de agua y saneamiento, y lo precario de sus servicios de salud.
Sin embargo, hasta ahora, Haití sólo ha registrado 41 casos y 3 muertes, en comparación con 3.614 casos y casi 200 muertes en la vecina República Dominicana.
Ambos países tienen alrededor de 11 millones de habitantes, pero Haití recibe muchos menos turistas e inmediatamente se declaró en estado de emergencia tras detectar sus dos primeros casos hace casi un mes, cerrando fronteras y escuelas, lugares de culto y parques industriales.
"Creo que reaccionamos muy bien incluso si la población tenía muchos pequeños lapsos, bailes (...), fiestas en la calle", declaró Jouthe.
Haití ha realizado relativamente pocas pruebas, 453, según el Ministerio de Salud, lo que significa que la incidencia del virus podría ser mayor.
El primer ministro dijo que el término inicial del estado de emergencia expira en breve y que el gobierno estaba considerando extenderlo. De cualquier manera, había decidido permitir que el sector de fabricación textil, que representa el 90% de las exportaciones, se reactive a partir del próximo lunes.
La industria comenzaría a funcionar al 30% de su capacidad para garantizar el distanciamiento social en el lugar de trabajo.
En todo el mundo, los países están debatiendo cuándo es mejor relajar sus bloqueos diseñados para prevenir la propagación del virus y reiniciar la economía.
La decisión de Haití puede parecer prematura dado que los expertos en salud advierten que el brote aún no ha alcanzado su punto máximo en América Latina y el Caribe. Pero sus necesidades económicas también son mayores que la mayoría.
"La pregunta era si morir de hambre o de coronavirus", dijo Georges Sassine, jefe de la Asociación Industrial de Haití.