Las presiones para aprobar la modificación al contrato de 150 megavatios de energía sucia otorgado de manera directa a CECHSA se han intensificado en los últimos días.
A pesar de contar con un dictamen legal en contra de las reformas negociadas por las autoridades de la ENEE y la carbonera, ejecutivos del consorcio honduro-guatemalteco y un grupo de funcionarios han intensificado una campaña de cabildeo para favorecer a la térmica, subrayó el informante.
"El tema continúa en la agenda de la junta directiva de la ENEE, hay mucha oposición a las modificaciones negociadas pero sabemos que hay presiones e intereses del Poder Ejecutivo para aprobar las reformas", agregó el denunciante.
Entre los funcionarios de la estatal eléctrica que han manifestado que CECHSA no ha cumplido con el contrato 013-2008 están el gerente Roberto Martínez Lozano y el subgerente técnico, Leonardo Deras.
Ambos han manifestado públicamente que el incumplimiento del contrato de 150 MW de energía generada con carbón mineral los ha obligado a buscar otras alternativas, por ejemplo la licitación de 50 megavatios con diésel, la que fue declarada nula por lo oneroso del costo del kilovatio hora, que era de 34 centavos de dólar.
La compra directa de energía con carbón fue autorizada por la administración de Manuel Zelaya Rosales el 19 de junio de 2007 a través del decreto ejecutivo PCM-012-2007 y aprobado el 9 de octubre de 2008 por el Congreso Nacional, sin embargo, a casi cuatro año de la declaratoria de emergencia en el sistema interconectado de la ENEE, la empresa CECHSA no ha comenzado con la construcción de la planta, lo que ha provocado serios problemas en el suministro de electricidad.
Modificaciones
Entre las reformas negociadas por el gerente de la ENEE, Roberto Martínez Lozano, y por el gerente de CECHSA, Juan Ángel Bueso Molina, destacan la ampliación de dos a diez años la generación de 50 megavatios con bunker, la que se entregaría a través de una planta instalada en tierra y no de una barcaza como está contemplado en el contrato 013-2008.
La segunda modificación que ha sido cuestionada es la modificación a la cláusula 20, la que autoriza al consorcio honduro-guatemalteco a ceder y gravar sus derechos sin cumplir con la Ley de Contratación del Estado. Inicialmente se aprobó que para que el vendedor pueda traspasar sus obligaciones debía acreditar con documentos una inversión de 60% en la construcción de la planta.
Las negociaciones están contempladas en un documento de 21 páginas y que tiene fecha 25 de enero de 2011.
Para que las reformas tengan vigencia deben ser aprobadas por varias instancias, aunque el dictamen jurídico del asesor legal de la ENEE, Alfredo Cruz Lanza, sostiene que solo el presidente de la República, Porfirio Lobo Sosa, en Consejo de Ministros, es el único que puede aprobar la citada modificación.
Fracaso
Un documento elaborado por una oficina pública y al cual tuvo acceso EL HERALDO concluye que las contrataciones de energía eléctrica realizadas en la administración Zelaya Rosa resultaron en un fracaso. A través del decreto PCM-012-2007, el gobierno autorizó la contratación directa de las empresas CECHSA para que generara 150 MW con carbón y Vetasa-Melecsa para que rehabilitará las plantas Sulzer y Alsthom, las que producirían 60 megas.
"Sin duda alguna, estos procesos fueron un fracaso, en vista que estas empresas tuvieron que adicionar nueva generación a partir de 2008 y 2009, y nunca iniciaron la construcción, peor aún, desmantelaron las plantas de la ENEE en Puerto Cortés", concluye el informe.
El documento subraya que la contratación directa fue cuestionada por el Tribunal Superior de Cuentas (TSC) y por el Banco Mundial por la serie de irregularidades cometidas durante el proceso, por lo que recomendaron se convocara a una licitación pública internacional, opiniones que no fueron tomadas en consideración por la junta interventora de la ENEE, la que en aquel momento era presidida por Arístides Mejía, secretario de Defensa en la administración Zelaya Rosales.