Las aspas de 34 aerogeneradores comenzaron a girar al ritmo del viento que sopla en los municipios de Santa Ana y San Buenaventura. Llevar a cabo la instalación de esta central eólica ofrecerá al país la oportunidad de reducir su factura petrolera.
Tegucigalpa, Honduras. Pese a ser su primera incursión en este campo de generación, Honduras se convirtió desde este martes en el país de Centroamérica que más produce energía eólica.
Las aspas de 34 aerogeneradores comenzaron a girar al ritmo del viento que sopla en los municipios de Santa Ana y San Buenaventura, convirtiendo este recurso natural en energía eléctrica limpia.
El proceso de entrega de los primeros 68 MW de energía eólica comenzó la noche del lunes, cuando se energizó la subestación de Santa Ana.
Para eso se conectaron los primeros aerogeneradores a la subestación, valorada en unos nueve millones de dólares y que ahora es propiedad de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE).
Aunque no se desarrollaron actos de inauguración, los inversionistas de Mesoamérica Energy realizaron un recorrido por el parque eólico que ahora se suma a los más grandes de Latinoamérica.
Al recorrido se dieron cita Mikael Karlson, CEO de Globeleq; Luis Castro, director de Mesoamérica Investments; Luis Garmendia, gerente de Gamesa, y Jesús Aragonés, gerente de desarrollo de negocios de Iberdrola.
El parque eólico, conocido como Cerro de Hula, tiene una extensión de 12,3 kilómetros, donde se instalaron los 51 aerogeneradores que producirán 102 MW de pura energía limpia. "Aquí estamos creyendo que sí se puede, fue duro lograrlo, pero aquí se ve el producto de tanto esfuerzo, de tanta gente, ha sido un trabajo en equipo", dijo Jay Gallegos, CEO de Mesoamérica Energy.
Este proyecto representa unos US$250 millones que la empresa Mesoamérica Energy invirtió en la construcción y puesta en marcha de la subestación y la operatividad de los aerogeneradores.
"Desde el principio me acogieron súper bien porque lo que traemos al país es algo que tiene sentido, no estamos trayendo algo malo, es algo limpio, es algo de lo cual estoy orgulloso, yo haría esto de forma voluntaria porque de verdad creo que es el futuro, esto es lo que hay que hacer", dijo Gallegos.
El ejecutivo de Mesoamérica Energy añadió que "hemos realizado 460 viajes de ida y vuelta al puerto sin un accidente, hemos trabajo 513.000 horas sin un día perdido por lesión, no solo es hacerlo, es hacerlo bien".
Aunque durante la entrega de la primera energía, denominada de prueba, el viento no fue tan fuerte como se esperaba, las autoridades de la estatal energética constataron el funcionamiento de los aerogeneradores y de la subestación, que de noviembre a mayo tendrá su mayor tiempo de operaciones. En este momento la empresa Mesoamérica Energy entrega a la ENEE cada megavatio de energía a un costo de 10 centavos de dólar el kilovatio.
Cuando se realice la entrega total de los 102 MW de energía a finales del año la facturación será de 12 centavos de dólar por kilovatio de energía limpia.
Esta construcción se ejecutó durante aproximadamente un año por el Consorcio Iberdrola-Gamesa. Ingeniería y Construcción México (Iberdrola) es una empresa subsidiaria de Iberdrola España. El grupo Iberdrola es el principal grupo energético español, una de las mayores energéticas del mundo y líder mundial en energía eólica.
Por su parte, Gamesa es la empresa suplidora de las turbinas, uno de los líderes mundiales en la fabricación de aerogeneradores, contado con más de 19.000 MW instalados en el mundo y unos 22.000 MW en desarrollo.
Iniciativa positiva
Con la puesta en marcha de este proyecto, los sectores productivos del país comenzaron a reaccionar. Fernando García, director ejecutivo de la Asociación Nacional de Industriales (Andi), dijo que "para nosotros es importante lo que ha ocurrido el día de ayer, es una iniciativa que es positiva desde el punto de vista financiero, de la parte ambiental y renovable, y también es un proyecto que ha tenido un impacto inmediato y rápido; si ustedes recuerdan, hace aproximadamente un año se puso la primera piedra de este proyecto y ya va a empezar a generar, lo que indica que cuando se hacen las cosas en orden y planificadas, se tienen resultados positivos y rápidos".
Agregó que "es un proyecto además que está dando también un impacto en la zona, en el desarrollo económico local de los municipios de San Buenaventura, Santa Ana y Ojojona, donde ya se mira el movimiento en la reparación de infraestructura vial, en lo que son las líneas de transmisión, se mira también movimiento turístico de los pobladores o los vecinos que van a visitar las instalaciones de la empresa y esto es positivo, ya que nos indica que se pueden hacer este tipo de proyectos sin necesidad de estar recurriendo a las famosas compras de emergencias y a los decretos así complicados y que van en contra de la parte técnica de su misma empresa".
Logro
El sector gubernamental también reaccionó de forma positiva a este avance en generación renovable. María Antonieta de Bográn, designada presidencial, comentó: "Creo que el inicio de estas pruebas de los 68 megas, que creo que nunca pensamos ver esta transformación en estos municipios del sur de Francisco Morazán, hoy son una realidad, incluso creo que cuando tenemos la oportunidad de pasar por allí, a todos los hondureños y hondureñas nos hace sentir orgullosos de que estamos contribuyendo a un mejor ambiente, a un mejor país".
Actualmente Honduras cuenta con un parque eléctrico altamente dependiente de los combustibles fósiles (petróleo y sus derivados) de más del 75%, además se estima que el 36% de la población no cuenta todavía con acceso a electricidad, mayormente en el área rural.
Por otro lado se conoce que el crecimiento de la demanda de energía eléctrica en Honduras se ubica en un promedio del 7% anual para los próximos 10 años.
La Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) debe buscar formas de generación que le permitan hacer frente a esta demanda creciente.
Llevar a cabo la instalación de esta central eólica ofrecerá al país la oportunidad de reducir su factura petrolera al disminuir el consumo de combustibles fósiles para la generación eléctrica y contar Honduras con el parque eólico más grande de Centroamérica.
Este proyecto ha permitido alcanzar desarrollo en las comunidades donde se construye. En los municipios de Santa Ana y San Buenaventura se ha logrado inscribir, con una inversión aproximada de 60.000 horas-persona, más de 220 dominios plenos de vecinos de estas comunidades, quienes ya se benefician al contar con sus títulos de propiedad gestionados por EEH, y más de 100 de ellos que en los siguientes 20 años estarán recibiendo un beneficio económico por el uso de sus terrenos en el proyecto, el cual contará con incrementos según la tasa de inflación del país.
La expectativa de los inversionistas es ampliar a 126 MW de energía con una expansión de 24 megas para el próximo año.
Este proceso de expansión ha comenzado por parte de la empresa Mesoamérica Energy, que buscará ampliar el contrato que mantiene actualmente con la estatal energética,De acuerdo con los ejecutivos de Mesoamérica Energy, las leyes hondureñas permiten ampliar el contrato en un 25 por ciento, sin la necesidad de renegociar el contrato vigente.