Pasar al contenido principal

ES / EN

Hyundai buscar se protagonista en el mercado automotriz de México
Jueves, Agosto 3, 2017 - 10:19

La firma coreana apuesta por crecimiento sostenido de ventas en un mercado que desplazará 2 millones de unidades en total en el 2020.

México es un mercado que tiene gran relevancia para Hyundai Motors: muy pronto estará en el top 10 global del corporativo coreano, pronostica Pedro Albarrán, director general de Hyundai de México.

El mercado mexicano es muy peculiar, explica el directivo: “En algunos aspectos se comporta como el sudamericano; en otros, como el de Estados Unidos, y en ciertas cosas es más parecido al europeo”.

Albarrán pronostica un futuro más que promisorio para el mercado interno de automóviles, “las cifras de ventas duraron muchos años estancadas y hemos empezado a ver cambios significativos, avances en los últimos años. La cifra récord de ventas en el 2016 es prueba de ello. Estoy muy optimista por Hyundai en lo particular, pero también por la industria en general (...) Creo que en el 2020 podríamos llegar a los 2 millones de unidades vendidas en un año en el país (en el 2016, se vendieron 1.6 millones)”.

La empresa coreana llegó a México en 1989 con una fábrica de cajas para tractocamiones. Desde entonces ha tenido un crecimiento muy dinámico. En sociedad con Chrysler, empezó a comercializar autos la década pasada y, desde el 2014, empezaron a realizar directamente la distribución de sus productos. “Hyundai quiere ser un jugador grande en México, por eso esperó tanto tiempo para venir a México, para hacerlo de una forma digna”.

Albarrán se incorporó a Hyundai desde el 2013. Desde el principio estuvo a cargo del lanzamiento e implantación de la marca. “Había nerviosismo. No sabíamos cómo iba a reaccionar el mercado, lo cierto es que rebasó nuestras expectativas. Hicimos un plan de cinco años, hemos superado nuestro pronóstico de ventas desde el 2014 hasta ahora. En el 2017 la meta es vender 42.000 y la tendencia es que llegaremos a 48.000, 50.000 unidades vendidas”.

El 2017 ha sido un año lleno de sorpresas. Así lo explica Albarrán: “Cuando el tipo de cambio se fue a 22 pesos por dólar, nos colocó en una situación muy complicada. Todas las armadoras estábamos perdiendo dinero en cada unidad que vendíamos. Somos empresas muy grandes y lo podemos aguantar un ratito, pero (...) los impactos no los puedes reflejar en el mercado de un día para otro. Es un traspaso lento. Es una industria tan integrada globalmente que no hay manera de que no te impacte un incremento en el tipo de cambio”. En el corto plazo, uno de los proyectos más importantes es el lanzamiento para el mercado mexicano del Accent, el primer automóvil de la marca hecho en México, en la planta de Nuevo León que tiene Kia (parte del mismo corporativo coreano) “vamos a un mercado muy competido, pensamos que será muy atractivo para personas de 25 a 35 años. Tenemos mucha confianza en el producto y en todo lo que ofrecemos con él, fuimos la primera marca que salimos al mercado con cinco años de garantía. Somos los primeros, y únicos, que hemos lanzado un seguro de llantas”.

El Accent se comercializó mucho tiempo en México bajo el nombre de Attitude, “es un producto muy importante para nuestro volumen de ventas: está en el segmento B, el más importante, y nos dará un impulso que esperamos hace más de tres años. Estamos en el sitio 10 (por volumen de ventas) y creo que el año que viene deberíamos pasar al noveno”.

Hyundai tiene 52 agencias distribuidoras en México. “Cada empresa automotriz maneja una relación con sus distribuidores. Nosotros definimos desde el día uno que nuestro socio estratégico más importante es el distribuidor. Han sido clave para lograr una lealtad de marca de nuestros clientes que es notable. Ellos nos han ayudado a encontrar la propuesta que el mercado mexicano necesita. Si equipas mucho un auto, se sale de mercado; si te quedas corto, le quitas atractivo. Las agencias son tan importantes para nosotros que su asociación tiene una oficina en nuestro edificio corporativo. El año que viene llegaremos a 65 agencias. Yo creo que allí vamos a frenar un poco”.

Pedro Albarrán es mexicano, con muchos años de experiencia en la industria automotriz. Ha trabajado con empresas de otras nacionalidades. ¿Cómo es la cultura de un corporativo coreano?, le pregunto: “Resuelven muy rápido, no hay burocracia. Lo que más me sorprende de esta empresa, y no sé si lo puedo generalizar a todos los coreanos, porque a veces una cultura organizacional no es una cultura general, es que es muy plana en su estructura organizacional. Cuando hablas de lanzar un producto al mercado, normalmente se lleva muchos años... analizando, planeando. En esta empresa todo eso es increíblemente rápido: las plantas reaccionan rápido; las áreas de ingeniería y de producto reaccionan muy rápido.”

En su descripción de Hyundai abunda en detalles: “Es una empresa que apostó por una integración vertical. Muchas de las autopartes que utiliza son fabricadas por la misma empresa. Hyundai produce el acero que utiliza en sus vehículos. Ese control permite mucha velocidad en el proceso. Esto contrasta con lo que hace la mayoría de las empresas de la industria automotriz; compran el acero que incorporan a sus productos a otras compañías”.

Lanzan el Accent hecho en México. Hyundai de México presentó su modelo Accent, el cual se puede adquirir ya en las 52 agencias de la marca en México. Se trata de un subcompacto del segmento B, el cual va dirigido un público de familias jóvenes, de entre 25 y 35 años de edad.

El vehículo sedán es armado en la planta de KIA en Pesquería, Nuevo León, y llega para competir en un segmento muy disputado donde los modelos líderes de ventas son el Versa, de Nissan y el Vento, de Volkswagen.

Otros modelos contra quienes se peleará por el gusto de los conductores mexicanos son el Chevrolet Sonic, el Mazda 2, el Peugeot 301, el Ford Fiesta Sedán, el Suzuki Ciaz o el Renault Logan. “Con Accent la seguridad es una especificación de serie, que cumple con las más altas regulaciones y estándares de seguridad. Cuenta con sistema de seis bolsas de aire, frenos ABS, control electrónico de estabilidad y control de asistencia en pendientes”, refirió la marca en un comunicado.

El vehículo, que porta un motor 1.6 litros con 121 caballos de potencia y 111 libras pie de torque acoplado a una transmisión manual o automática de seis velocidades, se podrá adquirir a un precio de entrada de 219,900 pesos. La versión más cara del coche, únicamente disponible con caja automática, tiene un precio sugerido de 285,400 pesos.

Autores

El Economista (México)