El Gobierno brasileño ha puesto bajo el Régimen Especial de Incentivos para el Desarrollo de Infraestructura un total de 10 de los 12 parques que conformarán el complejo, que con una capacidad de instalada de 566,5 megavatios (MW) será el mayor complejo eólico terrestre en Latinoamérica del grupo.
Sao Paulo. Iberdrola, a través de su filial brasileña Neoenergia, ha recibido un impulso al desarrollo de su 'megacomplejo' eólico terrestre de Oitis con la inclusión de gran parte del proyecto bajo el régimen de incentivos de Brasil.
En concreto, el Gobierno brasileño ha puesto bajo el denominado Régimen Especial de Incentivos para el Desarrollo de Infraestructura (Reidi) un total de 10 de los 12 parques que conformarán el complejo, que con una capacidad de instalada de 566,5 megavatios (MW) será el mayor complejo eólico terrestre en Latinoamérica del grupo.
El Reidi, lanzado en 2007, otorga incentivos fiscales a las empresas que inviertan en Brasil en proyectos de infraestructura en los sectores como los transportes, puertos o energía.
El complejo Oitis se ubicará entre los estados de Piau y Bahia, al Nordeste de Brasil, y su completa puesta en marcha está prevista para mediados de 2022, ascendiendo su inversión a unos 480 millones de euros.
Esos 566,5 MW de potencia auparán a Oitis al podio mundial de complejos eólicos terrestres del grupo Iberdrola por capacidad instalada, solo por detrás del estadounidense de Peñascal, situado en el estado de Texas (606 MW), y justo por delante del parque eólico escocés de Whitelee, ubicado al sur de Glasgow (539 MW).
Crecimiento en Brasil. Brasil es uno de los mercados estratégicos para el grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán, país en el prevé unas inversiones de unos 6.600 millones de euros (US$7.125 millones) hasta 2022, para seguir creciendo en las áreas de producción, transporte y distribución de energía eléctrica.
Gracias a unas inversiones de 14.500 millones de euros (US$15.650 millones) a lo largo de los últimos 20 años, la filial Neoenergia se ha consolidado como uno de los principales operadores eléctricos del país, con 700.000 kilómetros de líneas que atienden las necesidades de suministro de más de 34 millones de personas, y una capacidad de generación, operativa o en construcción, de 5.000 megavatios (MW).