El de Cochin, en India, será el primer aeropuerto que funcione solo con energía solar, independiente de la red general.

La solar es una de las energías alternativas en las que más se ha invertido en los últimos años. Los proyectos megalómanos termosolares y fotovoltaicos no dejan de construirse en varias partes del mundo. El aeropuerto de Cochín, en el sur de la India, es un ejemplo de este tipo de obras. Se convertirá en el primero que funcione solamente con energía solar. Se trata de un proyecto pionero que además de proporcionar independencia energética a las instalaciones ahorrará al medio ambiente un buen puñado de toneladas de dióxido de carbono.

Cochín tendrá el primer aeropuerto que funcione con energía solar gracias a una inversión de US$10 millones. Se colocarán un total de 46.150 paneles solares, que estarán en pleno funcionamiento a partir de mayo de 2016. El complejo producirá el equivalente para dar energía a 10.000 hogares al año.

Son 12 MW la capacidad prevista de la instalación solar que servirá para surtir al aeropuerto, que obtendrá independencia energética de cualquier otra fuente. Aun así, en el caso de que se necesite más electricidad que la producida por los paneles habrá un medio para obtenerla de la red general. De la misma forma, el excedente que se genere en el aeropuerto se podrá verter a la red.

Está previsto que los paneles solares permanezcan en funcionamiento durante 25 años, un plazo en el que se dejarán de emitir a la atmósfera 300.000 toneladas de dióxido de carbono. Las estimaciones del proyecto indican, sin embargo, que la inversión se recuperará en los cinco años que sigan a la puesta en marcha.

India es actualmente el tercer país más contaminante del mundo. Tal vez por esto el gobierno se ha propuesto aumentar en cinco veces el uso de la energía solar para 2022 y con este objetivo se invertirán US$100.000 millones en los próximos años. Otros proyectos más pequeños reflejan el esfuerzo indio por expandir la energía solar.

La Indian Railways se ha propuesto instalar paneles solares en los techos de los trenes, así como en algunas estaciones, con el fin de reducir la dependencia de su sistema de los combustibles fósiles. Otro de los proyectos más llamativos de India es el que consiste en cubrir los canales –algunas ciudades están plagados de ellos– con paneles solares. Por una parte se evita que el agua se evapore tanto y al mismo tiempo se aprovecha la radiación del sol para generar energía.