A las 1517 GMT, las acciones de BRF SA caían un 2,5% y las de JBS SA perdían un 1,4%, tras haberse desplomado hasta un 10% más temprano. Ambas compañías niegan haber cometido irregularidades.
Sao Paulo/Pekín. El impacto por el escándalo de corrupción en la industria cárnica brasileña se extendió el lunes, después de que China y Corea del Sur suspendieron algunas importaciones, la Unión Europea anunció que estudiaba acciones y los títulos de los frigoríficos BRF y JBS cayeron con fuerza.
China, el principal socio comercial de Brasil, decidió suspender la importación de productos cárnicos como "medida de precaución", dijo una fuente que pidió permanecer en el anonimato por la sensibilidad de la información.
El Ministerio de Agricultura de Corea del Sur dijo en un comunicado que endurecerá las inspecciones de carne de pollo importada desde Brasil y que prohibirá temporalmente las ventas de productos avícolas de BRF.
Las acciones se produjeron después de que una investigación policial brasileña identificó el viernes a BRF, JBS y a decenas de rivales menores como implicados en una supuesta trama de sobornos a inspectores sanitarios para ocultar condiciones insalubres de sus plantas de procesamiento.
La policía efectuó registros el viernes en seis estados en busca de más pruebas, afectando la reputación de uno de los pocos sectores vibrantes en el país más grande de Latinoamérica, que sufre la peor recesión de su historia.
La pesquisa de dos años, conocida como operación "La carne es débil", halló pruebas de que las empresas pagaron a inspectores y políticos para pasar por alto prácticas como el procesamiento de carne podrida y el envío de exportaciones con trazas de salmonella, dijo la policía.
A las 1517 GMT, las acciones de BRF SA caían un 2,5% y las de JBS SA perdían un 1,4%, tras haberse desplomado hasta un 10% más temprano. Ambas compañías niegan haber cometido irregularidades.
Los títulos de Minerva SA y Marfrig Global Foods SA bajaban también con fuerza (un 7 y un 4%, respectivamente) pese a no estar implicados en las investigaciones, afectados por la posibilidad de un aumento de las medidas contra la industria cárnica brasileña.
Brasil exportó US$6.900 millones en carne de ave y US$5.500 millones de carne de vacuno a todo el mundo el año pasado, según grupos de la industria.
La Comisión Europea dijo que está supervisando las importaciones de carne procedentes de Brasil y que prohibirá el acceso a la Unión Europea a las compañías implicadas en el escándalo, dijo un portavoz.
Chile anunció también una suspensión temporal de las importaciones de carne bovina brasileña.