El valor de la tonelada de acero se cotiza en US$800 y su incremento sería de US$50, lo que significa que a nivel local todos los derivados del acero aumentarían de precio.
La industria hondureña del acero analiza un fuerte aumento al precio de la varilla de hierro. Luego que los consumidores sufrieran un grosero incremento al valor de la bolsa de cemento gris, todo hace indicar que le toca el turno al resto de materiales de construcción.
Según información de propietarios de ferreterías, quienes prefirieron no revelar su nombre por temor a represalias de parte de las empresas productoras de acero, el precio de la varilla de hierro sufriría un alza en la segunda semana del mes de enero.
La justificación se centra en el incremento del precio internacional de la palanquilla, material del cual se deriva la varilla.
El valor de la tonelada de acero se cotiza en US$800 y su incremento sería de US$50, lo que significa que a nivel local todos los derivados del acero aumentarían de precio.
A pesar de estos incrementos de precios en los materiales de construcción, el gobierno, los empresarios y constructores no han patentizado su preocupación a estos sucesos.
Para el caso, Willian Hall Micheletti, ex presidente de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (Chico), comentó que "en este año nuevo este sector descansará sobre pilar de los proyectos de energía renovable, donde de invertirán 500 millones de dólares, además de los proyectos carreteros financiados por el BID y BM".
Hall no se refirió al tema de los incrementos de precios de los materiales de construcción, a pesar de que la bolsa de cemento que distribuye Cementos del Norte se incrementó en 11.50 lempiras y 7.80 la que vende Lafarge-Incehsa.
En el caso de la varilla de hierro, Honduras cuenta con dos grandes productores que absorben el 95% de la demanda total del mercado. En el segmento de la producción de varilla de hierro se constata efectivamente una estructura de alta concentración.
La estructura se deriva, principalmente, de la capacidad de absorción de la demanda interna, obligando la contracción del aparato productivo, antes que de una estructura producto de fusiones de tipo horizontal con fines restrictivos a la competencia.
Los datos de participación geográfica indican que Aceros Centro Caribe limita sus operaciones de venta en la zona norte, específicamente en San Pedro Sula y Puerto Cortés, lo cual consolida la posición de poder de mercado de Aceros Alfa en las restantes regiones geográficas del país, otorgándole una exclusividad territorial a dicha empresa.
La Comisión de Defensa y Promoción de la Competencia (CDPC) recomendó la aprobación de una normativa técnica que defina los parámetros mínimos de calidad de la varilla de hierro, tanto para la producción nacional como para la importación.
La creación de miniacerías se ha convertido en un competidor implacable de las grandes plantas integradas (que parten del mineral de hierro y terminan con productos acabados de acero) y que han surgido de las miles de millones de toneladas de acero que ellas producen. Se deben fomentar alianzas estratégicas entre mayoristas para la constitución de una empresa importadora de producto terminado.