La gigante BHP Billiton dijo que detendrá su producción en la mina Escondida en Chile, el mayor yacimiento de cobre del mundo, debido a una huelga que comenzará el jueves. En tanto, Freeport-McMoRan Inc advirtió que reducirá su producción en el enorme yacimiento Grasberg en Indonesia -el segundo más grande del mundo-.
Yakarta. Un declive previsto esta semana en la producción de las dos minas de cobre más grandes del mundo debido a huelgas y a otras dificultades amenaza con reducir el suministro global del metal, lo que impulsaba el miércoles los precios referenciales a sus mayores niveles en lo que va del año.
La gigante BHP Billiton dijo que detendrá su producción en la mina Escondida en Chile, el mayor yacimiento de cobre del mundo, debido a una huelga que comenzará el jueves.
En tanto, Freeport-McMoRan Inc advirtió que reducirá su producción en el enorme yacimiento Grasberg en Indonesia -el segundo más grande del mundo-, ya que enfrenta un paro de los trabajadores de la fundición y problemas para renovar el permiso para exportar.
El cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME) sumaba más de un 2% durante las operaciones del miércoles en Londres, a US$5.925 la tonelada, ante la preocupación por el riesgo para los suministros, mientras analistas destacaron que ya esperaban una oferta más ajustada para este año.
Standard Chartered ha estimado que más de 5.000 toneladas de producción de cobre podrían perderse por cada día en que BHP y Freeport reduzcan o detengan sus faenas de extracción en ambas minas.
En Chile, el principal sindicato de Escondida dijo que, a diferencia de otras paralizaciones anteriores, la huelga que comenzará el jueves podría ser extensa. El grupo de trabajadores anunció el miércoles que ya había iniciado el proceso de detención de plantas.
Standard Chartered proyectó que 25 días de huelga representarían 85.000 toneladas de producción perdida del yacimiento, más que el superávit global previsto de 80.000 toneladas.
En Indonesia, una huelga en la mayor fundición de cobre del país, la única planta de procesamiento de concentrado del metal de Freeport en el área, ha exacerbado los problemas de la compañía.
Freeport advirtió la semana pasada que podría verse obligado a recortar personal y producción en Grasberg si no obtenía la autorización del Gobierno para exportar a mediados de febrero. Una portavoz de la empresa, Riza Pratama, confirmó el miércoles que la minera tenía previsto empezar a reducir la actividad de extracción de cobre.
"Aún estamos negociando con el Gobierno", dijo Pratama a Reuters, mientras la empresa buscaba "alguna forma de que podamos exportar nuevamente".
