Una empresa brasileña y otra local invertirán para construir y poner en marcha sendos proyectos de energía solar, lo que permitirá aumentar más de un 5% la potencia energética instalada en la provincia.
Una empresa paulista y otra puntana (de San Luis) invertirán unos "US$80 millones" para construir y poner en marcha sendos proyectos de energía solar en San Luis, lo que permitirá aumentar más de un 5% la potencia energética instalada en la provincia, según confirmó hoy el Director del Programa Energías Renovables y Eficiencia Energética, Luis Rastrilla.
"Estamos muy satisfechos" por la llegada de inversiones a la provincia y "seguimos trabajando con diferentes compañías para que sigan apostando a San Luis para proyectos de energías renovables", declaró el funcionario puntano.
En diálogo con Télam, Rastrilla explicó que "en San Luis, la política que se ha utilizado es atraer inversiones privadas de empresas para que ellas tomen el riesgo y el beneficio" por la energía que podrán incorporar al Sistema Interconectado Nacional.
El funcionario se mostró "muy conforme" con el resultado de la licitación 1.5 del Programa RenovAr, que adjudicó dos proyectos de energía solar, que generarán 47 MW para abastecer el mercado eléctrico del país.
Las propuestas fueron asignadas a la brasileña Quaatro Participacoes S.A., que aportará 25 MW, y a la compañía puntana Diaser S.A., que generará 22 MW. Los proyectos, denominados Caldenes del Oeste y la Cumbre, respectivamente, se construirán en zonas cercanas a la ciudad de San Luis.
Las empresas ganadoras suscribirán un contrato a 20 años con Cammesa, la administradora del mercado eléctrico, que se compromete a comprar la energía que produzcan esos proyectos.
Los proyectos adjudicados se suman a otro emprendimiento provincial en renovables, que funciona hace unos años en la zona de Juan Llerena. Se trata de una planta de biogás de la Asociación Cooperativas Argentina (ACA) que genera 1,2 MW y cuyo aporte al sistema se incluyó recién a partir de la Ronda 1.0 del RenovAr.
"Ya contamos con un parque fotovoltaico chiquito, de 1,2 MW, es chiquito, pero ha servido de experiencia", relató Rastrilla, y anticipó la idea del gobierno puntano de "ampliar la capacidad a 2.4 MW para alimentar las Terrazas de Portezuelo", donde funciona la sede de la administración provincial.
"Desde el gobierno de la provincia estamos pensando en continuar con este tipo de inversiones, no para presentarnos en RenovAr, sino para cubrir porcentajes de renovables que establece la ley", acotó.
En relación con la problemática de transporte y distribución energética, el funcionario remarcó que en la provincia "contamos hoy por hoy con algunas redes de transmisión con capacidad" para la transmisión y puso de relieve su gestión y la de sus colaboradores para "identificar cuáles son los puntos más apropiados para el desarrollo de los proyectos".
Más allá de su conformidad por el resultado de la licitación, Rastrilla cuestionó la instrumentación diseñada por el Ministerio de Energía y Minería de la Nación para la Ronda 1.0 "Nos llamó un poco la atención porque habían hablado de una regionalización, que finalmente no se dio", señaló.
"Desde un principio, nos dijeron en el Ministerio que se iba a regionalizar, para que no hubiera provincias favorecidas por cuestiones naturales y que no tuvieran un liderazgo exclusivo en la licitación", añadió.
Rastrilla recordó que -desde el Gobierno Nacional- "nos dijeron algo que después no se cumplió. Estábamos en desventaja con el resto de los lugares ya que los vientos se concentran en la Patagonia y la radiación solar en el NOA".
En ese sentido, puso de relieve que "los proyectos que se presentaron en la provincia de San Luis terminaron compitiendo a mejor precio que los del propio NOA, lo cual habla de un trabajo muy bueno que hicieron las empresas".
"Esperemos que esto se revierta en la ronda 2.0", se esperanzó.
De todas formas, lamentó la falta de comunicación con el Gobierno Nacional en temas energético. "Hemos enviado cantidad de mails y llamados por teléfono que no fueron respondidos. Esta situación -dijo- nos tiene un poco confundidos ya que, aparentemente, no les interesa nuestra opinión".
Por su parte, el vicepresidente de Diaser S.A., Federico Szuchet, informó que "estamos trabajando en la ingeniería y vamos a estar empezando las obras en el segundo semestre de este año", al tiempo que se mostró confiado en "poner en marcha el parque hacia Febrero o Marzo de 2018".
En declaraciones a Télam, anticipó que la empresa tiene previsto invertir unos "20 o US$25 millones" y precisó que apelarán a "financiación externa" para avanzar en la construcción de la planta en localidad de La Cumbre.
De todas formas, destacó que la compañía posee recursos propios y "una buena posición como para encarar el inicio de las obras y no tener demoras".
Consultado acerca de la eventual contratación de trabajadores locales para la realización del proyecto, Szuchet respondió: "se requerirá mano de obra muy importante para la construcción, algo para la operación y el mantenimiento" aunque aclaró que "las plantas son bastante automatizadas".
El empresario lamentó haber quedado fuera del RenovAr 1.0 ya que "teníamos una excelente propuesta técnica y comercial en términos de los plazos de ejecución".
"Vamos a participar en la Ronda 2.0 ya que apuntamos a seguir desarrollando proyectos en energía solar y, de ese modo, poder abastecer a diferentes industrias a partir de la reglamentación de la ley, que obliga a todo gran consumidor a tener el 8% de energía renovable", concluyó.