Con una fuerte oposición pública a la construcción de nuevos reactores, Japón está obligado a reducir su dependencia de la energía nuclear.
Tokio. Japón planea limitar la vida útil de los reactores nucleares a 40 años, permitiendo una extensión del permiso sólo bajo condiciones estrictas, y busca obligar legalmente a los operadores a prepararse para accidentes graves, dijo el viernes el ministro a cargo del tema.
El plan es parte de la revisión de una ley sobre operaciones en plantas nucleares tras el devastador terremoto y tsunami del 11 de marzo que provocó colapsos en la planta de Fukushima y la peor crisis nuclear desde Chernóbil hace 25 años.
Con una fuerte oposición pública a la construcción de nuevos reactores, Japón está obligado a reducir su dependencia de la energía nuclear, que antes del desastre satisfacía alrededor de un tercio de sus necesidades de electricidad.
El plazo de tiempo en el que los reactores existentes se mantendrán en operación afectará los planes a largo plazo de las empresas de servicios públicos y determinará cuán rápido se aleja Japón de la energía nuclear.
El ministro de Medio Ambiente, a cargo de la gestión de la crisis nuclear, Goshi Hosono dijo en una conferencia de prensa que las excepciones al límite de 40 años serían raras.
"Va a ser muy difícil operar reactores nucleares más allá de 40 años y vamos a aplicar medidas estrictas en las operaciones de los reactores nucleares ya que la seguridad es la prioridad número uno", apuntó.
La legislación propuesta, que el gobierno aspira a presentar en una sesión del Parlamento a partir de este mes, marcaría la primera vez que Japón limitaría legalmente el tiempo en que los reactores nucleares permanecen en funcionamiento.
Bajo el sistema actual, los operadores de la planta nuclear pueden solicitar una extensión de las operaciones más allá de los 30 años y por lo general se concede una prórroga de 10 años, si se les da el mantenimiento requerido.
El permiso puede ser nuevamente extendido. El reactor nuclear más antiguo de Japón es el Tsuruga N º 1, que entró en servicio en marzo de 1970.