American Airlines y Delta Airlines también habían abierto oficinas este año. La decisión de JetBlue, que ha operado cerca de 2.200 vuelos entre Estados Unidos y Cuba desde 2016, se da pese a la decisión del Gobierno de Trump de enfriar las relaciones con La Habana.
La Habana. La aerolínea JetBlue inauguró dos oficinas comerciales en La Habana, en una nueva muestra de confianza de empresas de Estados Unidos en Cuba pese a las tensiones entre los países desde la llegada al poder del presidente Donald Trump.
American Airlines y Delta Airlines también habían abierto oficinas este año. La decisión de JetBlue, que ha operado cerca de 2.200 vuelos entre Estados Unidos y Cuba desde 2016, se da pese a la decisión del Gobierno de Trump de enfriar las relaciones con La Habana tras el acercamiento que se produjo con su predecesor, Barack Obama.
Además, en las últimas semanas creció una disputa entre las partes por un supuesto "ataque acústico" en el cual al menos 16 diplomáticos estadounidenses en Cuba y otros miembros de sus familias sufrieron daños.
Las únicas empresas estadounidenses con presencia en Cuba son Google, que tiene servidores y una sala de navegación, y Marriott International, que opera el Sheraton Four Point y el mes pasado dijo que podría abrir otro hotel en la isla en 2019.
Como parte de sus intentos por normalizar las relaciones bilaterales, Obama autorizó los vuelos regulares directos a la isla tras décadas de ausencia debido al embargo comercial.
"Estoy encantado de inaugurar esta oficina comercial un año y un día después de hacer historia (...) con el primer vuelo comercial de Estados Unidos a Cuba", dijo Robin Hayes, jefe ejecutivo de JetBlue en la oficina en el centro de La Habana. La otra está ubicada en el aeropuerto de la capital cubana.
Trump anunció en junio nuevas restricciones a los viajes de los ciudadanos de su país a la isla y a las empresas que hacen negocios con entidades bajo control de las Fuerzas Armadas de Cuba, revirtiendo en parte la política de acercamiento de Obama.
Alrededor de 300.000 estadounidenses, excluyendo a los cubano-estadounidenses, visitaron Cuba en los primeros seis meses de 2017, más del doble que en el mismo periodo del año pasado, según cifras del Gobierno cubano.