El caso se refiere a un vertido de unos 3.700 barriles de petróleo en noviembre del 2011 en el yacimiento Campo de Frade, en la cuenca marítima de Campos, a unos 120 kilómetros del litoral de Río de Janeiro, en el sureste de Brasil.
La justicia brasileña rechazó una demanda penal contra las empresas Chevron y Transocean y 17 de sus directivos por su presunta responsabilidad en un vertido de petróleo ocurrido frente al estado de Río de Janeiro en 2011.
El magistrado Marcelo Luzio negó la acusación y así se lo comunicó al Ministerio Público, que se había constituido como parte acusadora y ahora contará con un plazo de cinco días para estudiar el fallo y decidir si apelará o no, explicó el tribunal.
El caso se refiere a un vertido de unos 3.700 barriles de petróleo en noviembre del 2011 en el yacimiento Campo de Frade, en la cuenca marítima de Campos, a unos 120 kilómetros del litoral de Río de Janeiro, en el sureste de Brasil.
El yacimiento era operado por Chevron, que había contratado a la compañía Transocean, también estadounidense, para realizar los trabajos de perforación.
El derrame del crudo le valió a Chevron una multa inicial de US$25 millones, pero tras apelar logró reducir la sanción a US$17 millones, que canceló en septiembre pasado.