Según un informe de la Anif, la complejidad de la obra y sus altas especificaciones técnicas significarán un importante reto para que la industria local pueda participar en el proyecto como proveedores.
Bogotá. Se espera que la industria colombiana pueda beneficiarse de la demanda por sus bienes para ser usados como insumos para la ampliación de la refinería de Cartagena.
Un informe de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif) indica que la complejidad de la obra y sus altas especificaciones técnicas le pondrán a la industria colombiana una vara alta para participar como proveedores.
"Si éstas logran cumplir con los requerimientos técnicos, tendrán que demostrar su competitividad en precios. Y, si lo consiguen, la ampliación de la Refinería de Cartagena se habrá convertido en el examen final para la capacidad productiva de los sectores proveedores de insumos", dice el informe.
También es una gran oportunidad para el sector industrial colombiano en aras de incrementar sus ventas y así, poder convertirse en un proveedor de insumos de clase mundial para el sector petrolero.
La ampliación de la refinería le permitirá a Ecopetrol ponerse en la senda para avanzar en la búsqueda de la meta para aumentar su capacidad de refinación de 311.000 barriles a 650.000 barriles por día en 2015, dice el informe.
La modernización de la refinería permitirá pasar de refinar 80.000 barriles de petróleo diarios a 165.000 barriles, aumentando a 96% la conversión de crudos blancos.
Este megaproyecto representa un reto para la ingeniería colombiana, al poder suplir los servicios especializados que seguramente necesitará su ejecución con los altos estándares exigidos.
Este plan es una gran oportunidad para el desarrollo productivo y social de su zona de influencia, tanto en Cartagena como del departamento de Bolívar.
Destaca Anif que las ventajas de la ampliación de la refinería, que tiene previsto un presupuesto entre US$3.500 millones y US$3.800 millones, van más allá: generará una nueva demanda por empleo calificado, tanto técnico como profesional.
Recuerda el informe de Anif que sólo para 2010 se requerirán alrededor de 1.820 trabajadores. Para suplir esa demanda, a principios del presente año se inauguró en Cartagena un centro de capacitación para unos 5.000 empleados entre soldadores, electricistas, tuberos, pintores, mecánicos, entre otros, que se necesitarán en los próximos cuatro años.
La inversión para poner en funcionamiento este centro de capacitación fue de 3.100 millones de pesos (US$1.587.900), de los cuales 1.700 millones de pesos fueron aportados por Reficar, otros 1.700 millones de pesos por la Alcaldía de Cartagena y los restantes 700 millones de pesos por el Sena.