Se proyecta que el tren subterráneo conecte Quitumbe (Sur) con el Labrador (Norte), a través de un túnel de 22 kilómetros, y 15 estaciones intermedias, para transportar hasta 400.000 personas por día.
El alcalde de Quito, Augusto Barrera, informó este sábado que los directorios del Banco Interamericano de Desarrollo y la Corporación Andina de Fomento aprobaron los créditos para el Metro de Quito y que por tanto, se hace el cierre y se completa el financiamiento total de este sistema de transporte, explicó Barrera.
El BID y la CAF aprobaron así dos créditos de US$200 millones cada uno. En esta semana, las entidades financieras enviaron a dos comisiones técnicas para evaluar las condiciones crediticias para financiar el Metro, de US$1.400 millones.
“Con el metro, el 92% de los quiteños tendrán servicio de transporte y una parada de bus habrá a 400 metros de la residencia de un vecino”, manifestó Barrera quien agregó que a eso se suman los trabajos en el mejoramiento del espacio público, aceras, parques, plazas y bulevares, la recuperación de la autoridad pública en la definición del límite urbano, la creación de otras centralidades urbanas con servicios básicos, y, desde 2013, las competencias totales en materia de tránsito y transporte.
“Esto y mucho más servirá para mejorar la calidad de vida de los quiteños”, finalizó el burgomaestre en un despacho consignado por la Agencia Pública de Noticias de Quito.
En días pasados también se confirmó que el Banco Europeo de Inversiones aprobó un crédito de 200 millones de euros (unos US$260 millones) para este proyecto, mientras que 50% de su costo será cubierto por el Gobierno Central, con la asignación de US$700 millones.
El Metro de Quito es un proyecto de subterráneo que conectará Quitumbe (Sur) con el Labrador (Norte), a través de un túnel de 22 kilómetros, y 15 estaciones intermedias, para transportar hasta 400.000 personas por día.
El proyecto cuenta con estudios definitivos de diseño e ingeniería. Su primera fase se encuentra en proceso de licitación para construir las estaciones La Magdalena y El Labrador con financiamiento propio del Municipio de Quito y del Gobierno Nacional.
Esta primicia surgió en el marco de la sexta reunión de alcaldes de la unión de capitales de Iberoamérica que se desarrolla en la capital. La misión del BID y la CAF está integrada por 12 especialistas que revisan el proceso técnico, ambiental, jurídico, social y de fiscalización de la segunda fase del proyecto que contempla el túnel de 22 kilómetros, las restantes 13 estaciones, así como los 18 trenes de 6 vagones con los que operará el Metro de Quito.
Se esperaba, originalmente, que este tramo de crédito quede aprobado para finales de año.