Claudia Carbonell, directora de la Odepa, sostuvo a AméricaEconomía que los datos de producción de leche se explican "por factores meteorológicos asociados a una fuerte sequía que ha afectado a la Región de Los Lagos, en los últimos años, junto a precios internacionales deprimidos".
Diez años de un constante estancamiento. La sentencia corresponde al alicaido sector lechero de Chile, una industria que ha tenido un bajo crecimiento de 5,2% en una década.
Según cifras de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa), unidad dependiente del Ministerio de Agricultura, la producción total en 2006 fue de 2.400 millones de litros, mientras que el año pasado la cifra alcanzó los 2.525 millones de litros. Así, de acuerdo con estos números, en el período 2006-2016 se registró un crecimiento de solo 5,2% en la producción de leche.
Claudia Carbonell, directora de la Odepa, sostuvo a AméricaEconomía que los datos de producción de leche se explican "por factores meteorológicos asociados a una fuerte sequía que ha afectado a la Región de Los Lagos, en los últimos años, junto a precios internacionales deprimidos".
En la misma línea, Rodrigo Lavín, presidente de la Federación Nacional de Empresarios Lecheros (Fedeleche), declaró a AmericaEconomía que es cierto el "frenazo" y lamentó que parte del estancamiento del sector se deba a que la demanda por leche fresca no ha ido en aumento. Al contrario, es un déficit comercial que sigue a la baja.
Lavín pone ojo en el preocupante aumento de las importaciones, afirmando que el "el nivel de importaciones crece de forma continua y gana terreno en el mercado nacional, aumentando desde los 229 millones de litros, en 2011, hasta los 540 millones de litros, en 2016", detalló.
la situación ya había sido advertida en febrero de 2017 por Cristián Swett, gerente general de Manuka (empresa de importancia en el rubro), quien durante una exposición gremial narró frente a sus pares que la situación del sector es mucho más grave de la que se exhibe en los números oficiales. Según sus mediciones, en los últimos tres años la producción ha decrecido a una tasa de 3,7% anual.
Pero Carbonell considera que el horizonte traerá buenas noticias. La timonel de Odepa asegura que "el rubro tiene muy buenas perspectivas de crecimiento y de mejoramiento de la competitividad para los próximos años".
Según datos del organismo, la industria láctea mayor recibió -durante 2016- un total de 1.991 millones de litros, mientras que la industria láctea menor totalizó 330 millones de litros, con participaciones relativas de 85,8 y 14,2%, respectivamente.
Por otro lado, Harold Brethauer, vicepresidente de la Sociedad Agrícola y Ganadera de Osorno, agregó otra arista de la crisis del sector, a través de un reporte de la entidad. A su juicio, uno de los mayores problemas es que la leche debe ser retirada inmediatamente de los campos, ya que es altamente perecible, "cualquiera sea el precio que estén recibiendo (los agricultores), inclusive si este se encuentra por debajo del costo de producción".
