Con la reforma energética impulsada por Enrique Peña Nieto, "se da un paso a la revolución industrial y tecnológica que marcará un antes y un después en la historia de esta gran nación y su futuro", dijo el presidente de la Comisión de Energía, David Penchyna (PRI).
México. El senado de México entró este lunes a la que se vislumbra como la recta final del proceso de aprobación de las leyes reglamentarias de la reforma energética promulgada a fines de 2013, que abre el sector a la iniciativa privada.
Con la reforma energética impulsada por el presidente, Enrique Peña Nieto, "se da un paso a la revolución industrial y tecnológica que marcará un antes y un después en la historia de esta gran nación y su futuro", dijo el presidente de la Comisión de Energía, David Penchyna, del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Al presentar los dictámenes devueltos por la Cámara de Diputados, Penchyna aseguró que los cambios introducidos por ese órgano legislativo "son pertinentes, puntuales y respetuosos".
En el dictamen relativo a la Ley de Hidrocarburos y reformas a las leyes de Inversión Extranjera, Minera y de Asociaciones Público Privadas, el senador dijo que se otorgó certeza jurídica plena a los titulares de los terrenos, bienes o derechos sujetos a algún tipo de afectación por la exploración y explotación de hidrocarburos.
Añadió que los cambios hechos al dictamen que expide las leyes de la Industria Eléctrica y de la Energía Geotérmica, y que reforma la Ley de Aguas Nacionales, benefician también a los titulares de tierras donde se realicen ocupaciones derivadas del servicio público de transmisión y distribución de electricidad.
Sobre el dictamen correspondiente a las leyes de Petróleos Mexicanos (Pemex) y de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que también reforma otros ordenamientos, Penchyna aseguró que los diputados acertaron en los regímenes de presupuesto y deuda de ambas empresas.
Al exponer en tribuna la posición del PRI, el senador Óscar Román Rosas aseguró que con los cambios se asegura un respeto total a la tenencia de la tierra, puesto que cualquier empresa que quiera utilizar terrenos comunales o privados deberá contar con el consentimiento del propietario y pagar por los bienes utilizados.
Además, los bienes se usarán temporalmente y regresarán a sus dueños, que serán beneficiados con la riqueza extraída o transportada, señaló.
No obstante, al exponer los posicionamientos de sus grupos parlamentarios, senadores de los izquierdistas Partido de la Revolución Democrática (PRD) y del Partido del Trabajo (PT) expresaron su preocupación sobre la figura de ocupación temporal de tierras.
El legislador Alejandro Encinas, del PRD, dijo que con las modificaciones prevalece la intención de convertir a los legítimos dueños en empleados en sus propios terrenos.
La senadora Dolores Padierna, también del PRD, consideró que las modificaciones abren las compuertas al descontento social, pues no fueron consultados los productores agropecuarios, quienes no aceptarán renunciar a su forma de vida y costumbres ancestrales, según dijo.
A su vez, Manuel Bartlett, del PT, señaló que la ocupación temporal es inconstitucional y dijo que el Gobierno de Peña Nieto se ha sometido a los intereses de las empresas extranjeras que tienen interés en explotar los recursos naturales de México.
Los tres proyectos abordados este lunes tuvieron su origen en el Senado, que los aprobó en el actual periodo de sesiones extraordinarias y los envió para su revisión a la Cámara de Diputados, que los devolvió con un total de 39 modificaciones.
La Cámara baja culminó el sábado pasado su propio periodo extraordinario que se inició el 28 de julio, lapso en el que aprobó cuatro dictámenes enviados anteriormente por el Senado, tres de los cuales fueron devueltos por haber sufrido cambios y son los que discute a partir de este lunes el pleno de la Cámara alta.
Los diputados también aprobaron otros dos dictámenes referentes a temas fiscales originados en la Cámara baja, y que este lunes fueron avalados por las comisiones de Hacienda y Crédito Público, Energía y Estudios Legislativos del Senado.
Fuentes legislativas dijeron a Efe que se espera que esta misma semana el pleno del Senado apruebe definitivamente toda la legislación energética para su próxima promulgación por el Ejecutivo.
Las legislación reglamenta la reforma constitucional en materia energética aprobada por el Congreso y promulgada por el presidente Peña Nieto a fines del año pasado, que abre el sector a la iniciativa privada después de más de siete décadas de monopolio estatal.
Tanto la reforma como sus leyes reglamentarias han obtenido el apoyo legislativo del PRI, de su aliado el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), del conservador Partido Acción Nacional (PAN) y del partido Nueva Alianza.
Pero los izquierdistas PRD, PT y Movimiento Ciudadano se oponen a la legislación con el argumento de que representa la entrega de la riqueza energética del país a manos extranjeras, y apuestan por la convocatoria a una consulta popular en 2015 para revocarla.
