Estos puertos concentran 29,3% de la carga total que se recibe en el país, por lo que la variación a nivel nacional fue de -0,2%, al pasar de 144.5 millones de toneladas en los primeros seis meses del 2015 a 144.2 millones en igual periodo del 2016.

Durante la primera mitad del 2016 el movimiento de carga registró caídas anuales en los tres principales puertos del país: el de Manzanillo en Colima (0,1%), el de Cayo Arcas en Campeche (17,2%) y el de Coatzacoalcos en Veracruz (4,1%), de acuerdo con datos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).

Estos puertos concentran 29,3% de la carga total que se recibe en el país, por lo que la variación a nivel nacional fue de -0,2%, al pasar de 144.5 millones de toneladas en los primeros seis meses del 2015 a 144.2 millones en igual periodo del 2016.

En el mismo lapso de análisis dicho descenso representó el primero en los últimos cuatro años, reflejo de la pérdida de ritmo de la economía mexicana.

La disminución anual de 0,1% en el puerto más importante de México, Manzanillo, se debió a que su principal sector de carga, general contenerizada, con 63,3% del total del destino, se redujo 3,8%.

El comportamiento negativo en Coatzacoalcos fue consecuencia de la dinámica de su sector trascendental, petróleo y derivados, con 79,6% del total, que retrocedió 1,5%; mientras que la caída de 17,2% en Cayo Arcas, que sólo depende del movimiento de petróleo y derivados, se explica por la crisis de este sector.

Pega baja de exportaciones manufactureras. Al respecto, José Luis de la Cruz Gallegos, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (Idic), indicó que ello se debe a la expectación de la desaceleración económica “que se vive en la parte del sector externo (...) Esto incide en el menor movimiento de carga”.

En el primer semestre del 2016 las exportaciones manufactureras exhibieron una tasa anual de -3,0%, la primera variación negativa en los últimos siete años. En cuanto a las importaciones en este ramo, también tuvieron la misma suerte (-2,4%).

“Cuando uno ve que las exportaciones de manufactura, las importaciones de insumos intermedios y de bienes de capital (maquinaria y equipo) se reducen, eso también implica un movimiento menor en la parte portuaria”, expuso el especialista.

A su vez, explicó que la disminución de importaciones y exportaciones en el caso de Manzanillo, puerto que tiene un comercio fuerte con Asia (la mayor parte de las importaciones provienen de éste), así como un gran intercambio con Estados Unidos a través de la zona del pacífico, “se debe, fundamentalmente, a esta desaceleración”.

Destinos sin suerte. Otros puertos relevantes que también redujeron sus movimientos de carga total en los primeros seis meses del 2016, contra igual periodo del año pasado, fueron: Altamira en Tamaulipas (5,2%), Isla Cedros en Baja California (14,5%) y Punta Venado en Quintana Roo (13,4%); juntos concentran 14,8% del total nacional.

En sentido contrario, tres de los principales seis puertos de México ostentaron crecimientos anuales: Lázaro Cárdenas en Michoacán (2,9%), Dos Bocas en Tabasco (29,7%) y Veracruz (4,6%).

De la Cruz comentó que mientras la economía crezca, aunque sea a un ritmo de entre 2 y 2,5%, esto incide en la necesidad de transportar bienes finales, insumos intermedios así como maquinaria entre puertos y estados.

Asimismo, es importante destacar que el movimiento de carga de los puertos que corresponden totalmente a petróleo y derivados son Rosarito, Baja California, y Cayo Arcas, Campeche.