"Tenemos que volver a integrar la matriz energética de la región, donde Bolivia tiene un muy importante rol para el país del cual no tenemos por qué prescindir", declaró al medio argentino Clarín que publicó el sábado una entrevista 5 días de su investidura.
La Paz. El presidente electo de Argentina, Mauricio Macri, ha afirmado que Bolivia tiene un rol importante en la configuración de la matriz energética de la región y que no prescindirá del gas boliviano.
"Tenemos que volver a integrar la matriz energética de la región, donde Bolivia tiene un muy importante rol para el país del cual no tenemos por qué prescindir", declaró al medio argentino Clarín que publicó el sábado una entrevista 5 días de su investidura.
Afirmó además que su país debe disminuir las importaciones extrazona por ser 'caras' y tener inconvenientes y anunció el uso de gasoductos que vinculan Chile y Argentina.
"Las inversiones que ya hemos hecho en los gasoductos que vinculan (a ambos países) pueden usarse de Chile hacia Argentina, y cuando (los proyectos de hidrocarburos) Vaca Muerta y Los Molles entren en régimen de producción, en 3 a 4 años, vamos a volver a poder exportar gas desde Argentina a Chile, con certidumbre", aseguró.
Presa de una crisis de producción en 2002, Argentina redujo el volumen de sus exportaciones de gas a Chile y apeló al gas boliviano, dos años después, para abastecer su mercado energético y reducir la merma al mercado chileno.
Chile ha construido la planta de licuefacción de Quintero para equilibrar el déficit provocado por la caída de las importaciones gasíferas de Argentina, en base de un plan de importación del energético congelado de mercados asiáticos.
Las declaraciones fueron realizadas tras un encuentro sostenido con la presidente de Chile, Michelle Bachelet, en el Palacio de la Moneda en Santiago, Chile, el viernes.
Argentina importó gas natural boliviano por un montante de 4.000 millones de dólares entre 1971 y 1998 y desde 2004, volvió a importar el hidrocarburo boliviano en volúmenes ascendentes desde los 7 a los 27 millones de metros cúbicos diarios.
Bolivia, que también aprovisiona gas al gigante Brasil, posee la segunda reserva probada y probable de Sudamérica de gas natural.
